Siempre están en entredicho, siempre buscando una revolución que les lleve a competir con garantías de éxito contra los mejores y, sobre todo, tener la continuidad para poder ganar torneos internacionales de renombre. Así transitan por el rugby las selecciones de Italia y, en menor medida, Escocia. El XV del Cardo es el único de ambos que ha mostrado verdaderos brotes verdes, entendiendo éstos como continuidad en su juego, mientras que Italia ofreció sus dos caras de la moneda con un triunfo histórico ante Sudáfrica y una derrota ominosa frente a Tonga.

Tonga remonta ante una fatigada Italia

La selección oceánica parece haber hecho un grupo realmente competitivo, con jugadores jóvenes que ensalzan las virtudes tradicionales del país, como son potencia y velocidad, y minimizan la habitual anarquía táctica y defensiva. Así lo demostraron ante España y Estados Unidos, y han cuajado su mejor encuentro de la gira europea ante Italia.

Italia tomó ventaja en el 77 pero Tonga decidió con un golpe de castigo en el 80

El encuentro comenzó con dominio para los europeos, que merced a un ensayo de un enrachado Citadinni, se fueron al descanso con ventaja de 7-3. El partido se abrió mucho en la segunda parte, con intercambio de golpes constantes del que salió vencedor Tonga, con un golpe de castigo en el último minuto de Takulua. El resultado final fue de 17-19.

Escocia pone el broche de oro al año

El XV del Cardo parece encontrarse en plena progresión en su rugby, no solo por resultados sino por juego. Brillaron en la Copa del Mundo 2015, de la que solo un error arbitral pudo sacarles en el último minuto de su partido ante Australia, y en esta ventana de noviembre han ofrecido un excelso rendimiento, culminado con victorias ante Argentina y Georgia, y una derrota in extremis contra Australia, de nuevo.

En su duelo ante los georgianos, Escocia demostró que sigue siendo grande la brecha existente entre los mejores del continente y el equipo caucásico. Seymour, Maitland y Hogg lograron ensayos que se vieron continuados por una gran precisión de Laidlaw en los tiros a palos. El resultado final fue de 43-16.