No fue una tarea fácil para Kei Nishikori doblegar en cuartos de final a un jugador de la fase previa como el “desconocido” número 124 del mundo Austin Krajicek, quien hacía acto de presencia por primera vez en tal ronda. Prestó guerra el americano, confiado tras adjudicarse la primera manga y meterse al público en el bolsillo, y tanto fue así que obligó al nipón a remontar el parcial adverso y finiquitar el encuentro en un tercer set donde la experiencia del de Shimane fue la clave para salir vencedor de un duelo que se demoró hasta las dos horas y diez minutos de partido (4-6 6-3 6-4).

Nishikori mantiene, de esta manera, sus esperanzas intactas de cara a poder levantar el que sería su tercer título consecutivo en Memphis (algo que nadie ha hecho en la historia del torneo) pero antes deberá meterse en la final para poder optar a tal empresa. Su rival en las semifinales será Sam Querrey, quien en el duelo de cañoneros que le enfrentó a su compatriota John Isner, salió victorioso por un doble 7-6.

Desde Atlanta 2011 no se da una final en competición oficial entre jugadores americanos

La otra semifinal la compondrán el sudafricano Kevin Anderson que superó al sexto cabeza de serie del cuadro, Steve Johnson por un doble 6-4 y en su mano tendrá el poder ser el tercer sudafricano en alcanzar la final en Memphis tras Wayne Ferreira en 1992 -último en lograrlo-. Enfrente tendrá al norteamericano Donald Young que se deshizo en un duelo bastante apretado (7-6 4-6 7-5) del australiano Bernard Tomic y jugará con esta, su cuarta semifinal tras las tres disputadas anteriormente en su carrera - Washington 2011 y 2014 y Bangkok 2011-.

De ganar al sudafricano, quien domina el cara a cara 4-1, Donald Young podría acceder a la que sería la segunda final de su carrera. Además, en Memphis podría darse un panorama inédito desde 2011 en una competición oficial si ambos americanos en sendas semifinales lograsen sellar su pase a la antesala del título, y es que desde el ATP 250 de Atlanta 2011 no se da una final entre compatriotas estadounidenses y concretamente en Memphis no ven una final entre los suyos desde que en 2010 Isner y Querrey se enfrentasen en la pugna por el título.

Dos cabezas de serie y dos americanos en las semifinales de Memphis. Dos campeones del mismo torneo se enfrentan en la primera. Dos inéditos en la ciudad, lo harán en la segunda. El único torneo americano indoor será el escenario que dicte sentencia.