Entraron prácticamente de rebote, llegaron con pocas esperanzas a Londres, pero el tenis ofrece sorpresas y recompensas al esfuerzo. Todo un especialista como Boppana decidió aislarse de grandes nombres del circuito, hastiado de egos tras ver cómo las relaciones con sus compañeros se desgastaba progresivamente. Apareció en su vida un tal Mergea, veloz e intuitivo, que ha sabido devolver la ilusión por este deporte al indio.

El mejor torneo que disputaron juntos a lo largo del año fue el de Madrid, donde se proclamaron campeones, entrando una fase de modestos resultados en la fase final. Pero Londres se está erigiendo en la catapulta de una atípica pareja. Ya están en la final y no parecen dispuestos a conformarse.

Poco pudieron hacer Dodig y Melo

La consolidada pareja que forman el croata y el brasileño, se vio impotente al despliegue tenístico de Boppana y Mergea. Desde los compases iniciales del encuentro se atisbó una franca superioridad de los octavos cabezas de serie frente a los terceros.

Dodig y Melo desperdiciaron sus opciones en el primer set

Aún y así, Dodig y Melo tuvieron sus opciones en el primer set, tirando por la borda dos bolas de break y entregando su servicio en la primera y única bola de break que tuvieron el indio y el rumano. 6-4 finalizó la primera manga, lo que dio un impulso de moral a Boppana y Mergea, que adquirieron una confianza extrema, sobre todo al resto.

Y es el segundo set se vio marcado por la eficacia del indio y el rumano de fondo de pista. Mergea se está destapando como un maestro en labores de contraataque, y tiene una gran habilidad para jugar de fondo de pista. Dinámico al resto, lideró el tenis que llevó a la pareja a romper hasta en tres ocasiones el saque de Dodig y Melo. Éstos reaccionaron haciendo un break, pero acabaron claudicando por un contundente 6-2.

Finalistas inesperados, Boppana y Mergea no tienen ya nada que perder, y saldrán a pista tremendamente motivados, independientemente de cuál sea el rival.