Dos guerreros del tenis mundial frente a frente, en una batalla a tumba abierta y en el terreno que ambos mejor dominan. Su capacidad a todo tipo de superficies es lo que les ha conferido su posición actual de top-100, y ambos buscan con ahínco terminar el año por la puerta grande. En un sublime encuentro de más de horas de duración, los dos representantes españoles en Sao Paulo ofrecieron un magnífico espectáculo de calidad y coraje.

Toma y daca sin pausa

El encuentro fue un duelo de tú a tú desde el primer instante, con intensos y largos peloteos. Cervantes apostaba por un juego más directo, mientras que Muñoz de la Nava explotaba su condición de zurdo y se mostraba imperial al servicio.

Tomó ventaja en los primeros compases del encuentro el jugador nacido en Madrid, y ya no la soltaría durante toda la primera manga. Sacó muy bien y supo gestionar situaciones de igualdad máxima, sin achicarse ni un ápice y tirando mucho con su drive. Tras hacerse con la primera manga por 6-4, el segundo set seguía por los mismos derroteros. Tanto es así que Muñoz de la Nava restó para ganar el partido y llegó a tener bola de partido.

Íñigo afinó su puntería, incrementó su intensidad de piernas y creció mucho en confianza tras escabullirse de esa pelota de partido. Aprovechó la inercia positiva para imponerse en el tiebreak de la segunda manga, y mantuvo el tipo en la tercera. Muñoz de la Nava reaccionó, y lejos de hundirse, recuperó su mejor nivel. Cuando el encuentro parecía abocado a resolverse en otro tiebreak, Cervantes apretó y se hizo con el partido por 7-5 en el tercer set.

Guilherme Clezar dio la sorpresa en el otro grupo al vencer a Cecchinato

Ambos jugadores tienen opciones de clasificación, pero serán claves sus encuentros contra Paolo Lorenzi. El italiano se impuso a Dustov en un encuentro más igualado de lo esperado. Se mantienen intactas las opciones de todos los miembros del grupo.