No hubo sorpresa. Lara Arrubarrena, que había superado con creces una compleja fase previa, no puedo hacer frente a Anastasia Pavluchenkova. La rusa, que en el segundo acto sufrió más de lo esperado, avanzó a los cuartos de final de Sídney tras imponerse por 6-1 y 7-6(1) a la española. En la antepenúltima ronda, la rusa tendrá una prueba más complicada ante Karolina Pliskova, quinta cabeza de serie del torneo.

Comienzo arrollador de Pavlyuchenkova

La principal baza de la tolosarra era imponer el ritmo tomado en la qualy. Sin embargo, Pavlyuchenkova mostró la buena inercia con la que ha arrancado el año (cuartofinalista en Brisbane). Quebró el primer servicio de Lara y abrió brecha muy rápido (2-0). La española, pese a que acortó diferencias al romper el siguiente saque de su rival (2-1), no pudo hacer ni un juego más en todo el set.

La culpa la tuvo su saque, tímido, que no hirió en absoluto a su rival. Y es que la española fue incapaz de anotarse un punto con su segundo servicio (0/5) y tan sólo ganó un 42% con el primero. Una losa demasiado grande que terminó por hacerse notar en el marcador (6-1).

Un segundo acto igualado         

El segundo set tuvo un guion bien diferente. Arruabarrena mejoró su saque, pese a perder tres servicios a lo largo de la manga, y se hizo mucho más fuerte al resto. Más agresiva, provocó los errores de una Pavlyuchenkova que acusó la comodidad del primer set. Ninguna llegó a dominar con claridad la situación y se llegó a un desempate donde reinaba la incertidumbre. Pero esa duda se fue disipando rápidamente. El equilibrio vislumbrado desapareció y Pavlyuchenkova, 28 del ranking, ejerció su rol de favorita para cerrar el duelo con claridad (7-1)-