La tenista española, Garbiñe Muguruza, en el tercer puesto de la lista de las mejores raquetas en el panorama femenino mundial y en la misma posición como máxima favorita a hacerse con el título en el Abierto de Australia, es consciente de la recuperación de su lesión por la que abandonó el pasado certamen de Brisbane por dolor en la fascia plantar. Ahora, más recuperada, está contenta del nivel con el que está jugando en el primer Grand Slam de la temporada, el Abierto de Australia. 

Tras ganar en la jornada de hoy a la belga Kristen Flipkens, avanza hacia la tercera ronda, y declara sentirse “cómoda” jugando. De igual modo, sabe que es necesario ir progresando despacio. En 79 minutos Muguruza se deshizo de la belga por 6-4 y 6-2, con lo que el resultado es positivo y el avance constante. “Estoy contenta de sacar estos partidos adelante. Kristen es una rival difícil, muy incómoda y este tipo de victorias me ayudan a ganar confianza y ritmo. En estas primeras rondas la clave es encontrarme cómoda”, explicó la 3 de la WTA.

Tras las malas sensaciones en las primeras semanas del año, esta segunda victoria en la pista central del Open de Australia supone un soplo de aire fresco para la hispanovenezolana. “Es una buena victoria, estoy satisfecha. Sabía que debía ser paciente y poco a poco ir haciendo mi juego”, sentenció. 

Ahora le espera en la tercera ronda, la checa Barbora Strycova, 48 de la WTA, ya que esta derrotó a su rival, la estadounidense Vania King, 349 de la WTA, a la que superó en una hora y 47 minutos y con un marcador de 7-6 (5) y 6-4. Muguruza y Strycova se han enfrentado en un total de dos ocasiones, con un balance claramente positivo para la tercera favorita en Australia, que ha vencido a Strycova en las dos anteriores, en Stuttgart y en Tokyo en al temporada pasada.