Después de imponerse a Facundo Bagnis, Pablo Cuevas, partiendo como tercer cabeza de serie del torneo brasileño comparecía en los cuartos de final para medirse al wild-card brasileño Thiago Monteiro, que para llegar a la antepenúltima ronda del torneo tenía que deshacerse de los españoles Nico Almagro y Daniel Muñoz de la Nava, en un encuentro que completaba la jornada de cuartos de final, en el último turno de la Pista Central.

Monteiro sigue de fiesta en casa

A pesar de conseguir solventar su primer saque del partido, Cuevas no lo tenía nada fácil, y es que Monteiro disponía de dos bolas de rotura que no conseguía aprovechar, pero aún así creaba miedo en el tenis del uruguayo. Una vez superó sus primeras dificultades Pablo en el encuentro la igualdad fue máxima, equilibrándose las fuerzas entre el cabeza de serie número tres y el wild-card brasileño, dos fuerzas totalmente opuestas pero con un solo mismo objetivo, el de pasar a las semifinales del torneo brasileño.

Thiago Monteiro sube a la red para devolver una bola | Foto: Brasil Open
Thiago Monteiro sube a la red para devolver una bola | Foto: Brasil Open

Monteiro estaba como pez en el agua, jugando delante de su público y sin nada que perder, el brasileño ponía contra las cuerdas llegando incluso a quebrar el saque de Cuevas para colocarse con 5-4 a favor, disponiendo de su servicio para cerrar la primera manga, pero el brasileño vería como los nervios aparecían en su tenis. Thiago tenía que salvar hasta dos bolas de break para tener su primera bola de set después de mucho sufrimiento, consiguiendo llevarse el parcial por 6-4 después de 42 minutos de partido.

Cuevas despierta del letargo para conseguir remontar el encuentro

Ni mucho menos cambió el panorama después de un pequeño descanso, y es que al volver a pista Monteiro tenía el mismo grado de concentración que al principio, siendo capaz de quebrar el servicio de Cuevas en el primer juego de la segunda manga, colocándose con 1-0, un resultado que no era capaz de ampliar, sino que se encontraba con el despertar de Pablo Cuevas. El uruguayo entraba en acción recuperando la rotura sufrida igualando la contienda, para a continuación consolidar el quiebre hasta el 1-2.

Pablo Cuevas antes de golpear una bola desde el fondo de pista | Foto: Brasil Open
Pablo Cuevas antes de golpear una bola desde el fondo de pista | Foto: Brasil Open

A partir de ahí tal y como ocurriera en el primer set tanto Cuevas como Monteiro se intercambiaban los golpes en forma de juegos a su favor, pero con 2-3 tendría la oportunidad Pablo de quebrar el saque de su rival, y este no se lo permitía subiendo el empate al electrónico. Avisó una vez, pero dos no, Cuevas subió su nivel al resto y eso puso en aprietos a Thiago que llegó un momento en el que ya no pudo más y entregó no solo el quiebre a Pablo, sino la opción de que este llegara hasta el 3-5, momento en que no le tembló el pulso al uruguayo para llevarse el segundo set por 3-6.

Visto y no visto el paso a semifinales

Como se de una hoja marchita se tratara, Monteiro poco a poco fue bajando su intensidad en los golpes y cediendo un importante terreno en pista al cabeza de serie número tres del torneo, Pablo Cuevas, que supo tirar de experiencia para conseguir no solo quebrar un vez el saque de su rival, sino hacerlo hasta en dos ocasiones y llegar de nuevo al 3-5, donde el pulso no le tembló, se llevó el tercer y último set por 3-6, y accedió a las semifinales del torneo brasileño por 6-4, 3-6 y 3-6 después de dos horas y dos minutos de partido.