Tras sucumbir en segunda ronda de Doha y Dubái, además de caer en cuartos de final de Indian Wells, Simona Halep compareció en el Premier Mandatory de Miami estando en el número cinco del ránking WTA, teniendo que medirse en el torneo americano ante la tenista alemana, Julia Goerges, que acudía a la cita en Cayo Vizcaíno después de caer en su primer partido de Doha e Indian Wells, siendo así la número 66 en el ránking, mostrando así 61 puestos de diferencia.

Una remontada que bien vale un parcial

El hecho de tener muchos puestos de diferencia en el ránking WTA ni mucho menos impidió que Goerges planteara batalla durante los primeros compases del choque. Halep entró en una espiral de golpes negativos al comienzo, dado que Julia conseguía poner contra las cuerdas a la tenista rumana, quebrando su servicio en el segundo saque de la primera manga, colocándose primero con 2-0 a favor, y a continuación yéndose hasta el 3-0, pudiendo así contemporizar el choque sin mayores problemas ante una rival que ni mucho menos planteó batalla sobre la pista.

Tardó en despertar del letargo en el que estaba sumida, y es que Halep logró romper el servicio de su rival para recuperar distancias colocándose con 3-2 en desventaja. No había hecho más que comenzar el festival de juego de Simona, que se mostraba como pez en el agua sobre la pista número uno, yéndose rauda y veloz hasta el 3-4, donde Goerges veía más que necesario que Michael Geserer, su entrenador, acudiera al rescate para intentar sacarle del mal momento que estaba viviendo. Al llegar al 4-5, Halep tenía la responsabilidad de cerrar la primera manga, algo que no tuvo nada fácil, disponiendo Julia de dos bolas de rotura que no aprovechó, y lo terminó pagando la tenista alemana. Simona se vino arriba y cerró el primer parcial por 4-6, después de 58 minutos de partido.

Velocidad de crucero hacia la tercera ronda de Miami sin mayores problemas

Tras un pequeño descanso en el que Halep aprovechó para pedir la ayuda de su entrenador, volviendo a pista antes que Goerges, que se había ido al vestuario. Le costó entrar en acción a Julia, teniendo que salvar dos bolas de rotura en favor de la tenista rumana, que se colocó con 1-0 a favor. La primera la solventó con sufrimiento, pero a la segunda no lo consiguió la tenista alemana, sucumbiendo a los golpes de Halep, que quebraba su servicio para colocarse con 1-2 a favor primero, y a continuación iba rápidamente hasta el 1-3. 

Pronto dejó de estar en el partido Julia Goerges, siendo incapaz de darle la vuelta al sinfín de bolas de rotura que dispuso Simona Halep, para irse rauda y hasta el 1-4, desde donde poder tener la posibilidad de encarar el final del partido cómodamente. La tenista rumana hizo sus deberes, solventando su saque sin problemas para tener la posibilidad de cerrar el partido al resto, algo que le permitía llevarse el segundo parcial por 1-6, y por ende lograr el pase a la cuarta ronda del Premier Mandatory de Miami por 4-6 y 1-6, después de una hora y 34 minutos de partido.