Adiós a la pista dura y hola a la tierra batida. Todas las miradas están puestas en Charleston, un torneo que cuenta con tenistas de élite. La defensora del título Angelique Kerber es la principal favorita al título. Belinda Bencic, Lucie Safarova y Venus Williams son sus principales rivales, entre las que se que quiere colar la española Lara Arruabarrena. Faena complicada, pero por qué no creer.

Del 4 al 10 de Febrero se celebra en la localidad estadounidense de Charleston este torneo, el Volvo Car Open de Charleston, clasificado como WTA International y que reparte casi 220.000 euros en premios. Tras los dos primeros torneos de categoría Premier Mandatory de Indian Wells y Miami llega un torneo menor como Charleston, que se caracteriza por su superficie de tierra verde grisácea.

Lara Arruabarrena disputó ayer dos partidos en el ITF de Osprey. Hoy ha debutado en Charleston sin apenas descanso y tras un viaje largo. Obviamente, esto ha pesado.

Lara empezó enchufada

Ya en el primer juego del partido dispuso la española de tres bolas de 'break', que fueron salvadas 'in-extremis' por la jugadora número 108 del mundo. Mientras Lara ganaba sus servicios con comodidad, en el quinto y séptimo juego del partido volvió a tener una bola de rotura en cada uno a favor, que tampoco pudo aprovechar. Demasiadas oportunidades estaba desaprovechando la jugadora número 80 del ránking WTA, sin embargo, esta insistencia tuvo su premio. Con 4-4, juego clave, rompió el saque de su rival a la cuarta oportunidad y no le tembló el brazo, ni nada, a la hora de sacar para ganar el primer set. 6-4 para Lara Arruabarrena tras cuarenta y siete minutos. Nueve bolas de quiebre a favor de la española por ninguna de la estadounidense, nada más que añadir.

Pero se fue desenchufando con el paso de los minutos

Tras las nueve bolas de 'break' que tuvo en la primera manga, la jugadora nacida en San Sebastián tuvo otras cuatro más en el primer juego del segundo set, donde volvió a quebrar a Rogers. Sin embargo, la jugadora de Estados Unidos le enchufó tres juegos consecutivos para establecer el 3-1 a su favor. Los dos siguientes juegos, fueron dos roturas más, una de cada jugadora, obviamente. Por lo tanto, el marcador reflejaba el 4-2. Shelby forzó el set definitivo tras vencer por 6-3 tras treinta y nueve minutos, en un parcial muy irregular donde se produjeron hasta cinco 'breaks'.

Más miedo que vergüenza de ambas

Lara se rehizo y volvió a encontrar su juego para establecer un prometedor 2-0 inicial en el set definitivo, sin embargo, su nivel no se mantuvo y le igualaron el marcador en un abrir y cerrar de ojos. Con el 4-3 a favor de la española con saque de la estadounidense, comienza la locura. Tres 'breaks' consecutivos en el momento más crucial del choque. Esto le dio la victoria a la española en un tercer set que se decidió por 6-4, tras una inestabilidad propias de una primera ronda entre jugadoras que nunca se habían enfrentado y un momento más que tenso.

Angelique Kerber, próxima rival La número uno del torneo y vigente campeona será la rival de la jugadora que reside en Barcelona en segunda ronda, al igual que el año pasado. Partido dificilísimo. A disfrutar.

Tras jugar ayer las semifinales del ITF de Osprey frente a Sakkari a las 18:30 y ganar por 6-3 y 6-1, tuvo que disputar la final el mismo día unas horas después, a las 21:30. Quedó subcampeona tras perder con la local Brengle, número 54 del ránking, por 4-6, 6-4 y 6-3. Se le acabó el fuelle, como era normal. Sin nada de descanso y tras un largo viaje, hoy ha logrado vencer en otro partido a cara de perro. Lara debería estar muy orgullosa de ganar un partido así. A descansar un poquito, que no viene mal, porque le llegó a decir a su entrenador en tono de broma a mitad del segundo set: ''Las cejas no me duelen''. Dando a entender que, además de su maltrecho hombro, le dolia hasta el alma.

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