Inesperado traspiés de uno de los grandes favoritos a brillar en el césped. Richard Gasquet es un jugador polivalente donde los haya, que históricamente se ha adaptado a la perfección a la hierba tal y como demuestran sus dos títulos en Nottingham y puesto de semifinalista en Wimbledon. Sin embargo, ya en la treintena, el de Bèziers es un motor diésel que requiere de ritmo y continuidad en su juego, algo de lo que le ha privado la lluvia sobre Londres.

Fue tortuosa la jornada en la capital británica, teniéndose que interrumpir el encuentro hasta en tres ocasiones. Richard habrá de pedir una wildcard en alguno de los torneos de la semana que viene si quiere llegar rodado a Wimbledon, y despejar la desconfianza que genera esta derrota tan inesperada, al producirse sobre un jugador en caída libre.

Johnson resurge de sus cenizas

El estadounidense lleva sumido en una profunda crisis durante toda la temporada. No ha vuelto a jugar al nivel que demostrara en la fase final del pasado año, especialmente en los torneos de Viena y Valencia. El revés cortado de Steve puede ajustarse a la perfección al carácter deslizante de la hierba, tal y como ha demostrado.

Comenzó el partido totalmente desconectado, y llegó a ir perdiendo por 4-0. Parecía que el partido se resolvería por la vía rápida en favor del galo, pero Gasquet se relajó y Johnson soltó el brazo. Comenzó a moverse mejor, a ganar terreno en pista y terminar en la red con solvencia.

Steve Johnson en Queen´s. Foto: zimbio
Steve Johnson en Queen´s. Foto: zimbio

Gasquet tuvo oportunidades de sobra para cerrar el partido, incluso cuando el marcador ya estaba desequilibrado, ya que desperdició un 15-40 en el undécimo juego. Johnson supo salir del entuerto con gran aplomo, y en el tiebreak jugó su mejor tenis para poner tierra de por medio.

El siguiente rival del estadounidense será el ganador del duelo entre García-López y Dolgopolov

Fue un golpe moral muy importante para el francés, que se vino abajo y experimentó severos problemas para adaptarse a la húmeda hierba londinense. Mejoró mucho al saque el estadounidense y redujo al máximo todo atisbo de reacción de Gasquet, que se vio impotente ante el despliegue de efectos cortados y golpes ganadores de Johnson.