Apenas dos meses después de inaugurar su palmarés de Copa Davis con su primera ensaladera, el equipo argentino se prepara para iniciar la defensa del título ante un rival con el que ya se vio las caras el año pasado en su camino hacia la gloria, la selección italiana. Para superar esta primera ronda del Grupo Mundial 2017, el plantel argentino contará con la ayuda del público local, que se congregará durante el próximo fin de semana en el Parque Sarmiento de Buenos Aires, la sede de la eliminatoria contra Italia. Dicho parque fue inaugurado en 1981 en la ciudad bonaerense, concretamente en el Barrio de Saavedra, y es uno de los espacios más visitados en cuanto al turismo cultural se refiere, al contar con importantes instalaciones deportivas, entre las que destacan varios campos de fútbol profesional, balonmano, piscinas olímpicas y por supuesto, varias pistas de tenis.
Argentina, sin los héroes de Zagreb
Ante las ya conocidas bajas de sus dos mejores jugadores y principales culpables de la gesta de Zagreb, el capitán argentino Daniel Orsanic, ha llamado en su lugar al bonaerense Diego Schwartzman, número 54 del mundo en individuales y al veterano Carlos Berlocq, actualmente situado en el puesto 90 del ránking individual de la ATP. Los otros dos tenistas que conformarán el cuarteto argentino sí que estuvieron presentes en la final del año pasado y su valía quedó ampliamente demostrada al lograr varios puntos capitales en el camino hacia el título. Hablamos de Leo Mayer y de Guido Pella, que si bien es cierto no pasan por su mejor momento de forma, en una competición como ésta siempre se han dejado la piel por su país.
La eliminatoria se jugará al aire libre y sobre superficie de tierra batida, en un estadio con capacidad para unas 6.000 personas, aproximadamente Por lo tanto las opciones que baraja Orsanic, tanto para los encuentros de individuales como para el de dobles, son múltiples ya que cada jugador citado anteriormente puede desempeñarse perfectamente en cada modalidad. En principio y salvo cambios de última hora, Schwartzman será el número uno argentino y estará por ver si Orsanic se decanta por la experiencia de Mayer, autor del quinto y decisivo punto en las semifinales del año pasado ante Gran Bretaña, o por la juventud de Guido Pella. En cuanto a Carlos Berlocq, sus últimas tres presencias con el equipo argentino han sido en la modalidad de dobles, por lo tanto, es factible pensar que sea uno de los dos jugadores elegidos por Orsanic para disputar el encuentro por parejas del sábado, probablemente haciendo pareja con Mayer, quien ha sido su compañero en dos de esos tres choques. En todo caso , como es habitual en un torneo como éste, será el devenir de la propia eliminatoria el que marque la elección de uno u otro jugador.
En cuanto a experiencia, Leonardo Mayer es el que acumula un mayor número de eliminatorias disputadas desde que debutará en 2009, con un total de once y un balance final de 13 victorias por seis derrotas. Le sigue Berlocq, con diez nominaciones que se saldaron con ocho triunfos y nueve derrotas. Pella y Schwartzman, por su parte, han disputado un total de tres cruces. Mientras que Pella ha logrado tres triunfos en cuatro encuentros, Schwartzman todavía no ha conseguido ninguna victoria, habiendo cedido en sus tres encuentros anteriores. Veremos si el bonaerense puede desquitarse este fin de semana.
Italia, con todo su arsenal
Al contrario de lo que le sucede a su rival, la selección italiana se presenta con su cuarteto de gala, formado por Paolo Lorenzi, Fabio Fognini, Andreas Seppi y Simone Bolelli. Cuatro jugadores dotados de suma calidad y con la experiencia necesaria como para complicar la vida a cualquier equipo. Al igual que ocurre con sus oponentes, el capitán italiano, Corrado Barazzutti, tiene a su disposición una amplia gama de variantes de cara a la eliminatoria. De los cuatro tenistas seleccionados, quizá solamente Simone Bolelli sepa con seguridad cuál será su papel en el cruce, puesto que en la mayoría de sus apariciones con la "azurra", el de Bolonia ha desempeñado con bastante éxito el papel de doblista. Concretamente su balance desde que debutará hace ya diez años es de 17 victorias por 12 derrotas. Diez de esas victorias se produjeron en el apartado de dobles. Del resto del equipo, tanto Fognini como Seppi y Lorenzi, pueden actuar perfectamente en ambas modalidades.
Lorenzi debutó en 2010 y ha disputado hasta ahora cinco eliminatorias, con un récord de 4 victorias por dos derrotasA sus 35 años, Paolo Lorenzi se presenta como el teórico número uno italiano (es el número 43 del ránking ATP), aunque bien es sabido que jugadores de la talla de Fognini y Seppi podrían sustituir sin ningún problema al romano. De hecho, Seppi es el más veterano de los cuatro. El de Bolzano debutó con tan sólo 20 años en 2004 y ha defendido a su país en un total de 20 eliminatorias, con 20 triunfos por 18 partidos perdidos. Fognini, por su parte, afincado en el puesto 48 del mundo en la actualidad, defendió por primera vez a su selección en 2008. Siempre que ha sido nominado ha disputado algún partido y es el que balance tiene de los cuatro, con 23 victorias por diez derrotas. Contrariamente a lo que suele sucederle en el circuito ATP, con su selección, el actual pupilo de Franco Davín ha mostrado siempre su mejor versión y sobre todo, un mayor sacrificio sobre la pista.
Argentina domina el cara a cara
La de este fin de semana será la ocasión en la que ambos países se vean las caras en Copa Davis. Argentina ha vencido en dos de ellas mientras que Italia se llevó el gato al agua en la restante. La primera vez que ambas selecciones se enfrentaron fue en 1980, en los cuartos de final, con triunfo final para Argentina por un contundente cinco a cero. En aquella selección brillaba con luz propia el gran Guillermo Vilas, el cual se llevó sus dos encuentros de individuales en el Foro Itálico de Roma. Tuvieron que pasar 34 años para que ambos países volvieran a verse las caras. En la localidad argentina de Mar de Plata, Italia se llevó la primera eliminatoria del Grupo Mundial de 2014 con un triunfo por tres puntos a uno. La estrella de aquel cruce fue Fognini, autor de los tres puntos que dieron la victoria a su país.
Pero si hay una victoria que Argentina guarda de manera especial en su retina fue la del año pasado, otra vez como visitante, y que significó el pase hacia las semifinales de un torneo en el que acabarían inscribiendo su nombre en el palmarés de ganadores por vez primera en la historia del país. En la localidad italiana de Pesaro, Argentina derrotó por tres a uno a Italia, en la que destacó el retorno de Juan Martín Del Potro al equipo nacional tras años de ausencia. Pero el mayor protagonismo recayó sobre Federico Delbonis. El de Azul venció en sus dos encuentros de individuales ante Seppi y Fognini, respectivamente. Se da la casualidad de que en los tres precedentes entre ambos, todos en tierra batida, siempre ha vencido el equipo visitante. Veremos si esta vez Argentina logra romper con la tradición o si continuará la maldición local.