No está siendo un buen comienzo de año para Dominic Thiem. Las dudas que lo acompañaron durante toda la segunda parte del año pasado no sólo no han desaparecido sino que parece que van en aumento en este comienzo de 2017. El austríaco cayó en su debut en el ATP 250 de Sofía ante el georgiano Nikoloz Basilashvili, número 87 del mundo, pero que dominó totalmente a un apático Thiem al que venció en apenas una hora y cuarto de juego. 

Sólo un 42% de primeros servicios dentro por parte de Thiem. Por contra, Basilashvili se llevó el 77% de puntos con su primer saque y el 64% con el segundo ​Al número ocho del mundo se le vio muy apático desde el principio del partido. La enorme diferencia entre el ránking ATP de ambos (79 posiciones) no se notaba en la pista. Thiem se encontraba muy parado de piernas y extremadamente encogido en cada uno de sus golpes. Las malas que desprendía el pupilo de Gunter Bresnik se confirmaron cuando en el séptimo juego llegó la primera rotura de saque del encuentro en favor de Basilashvili (4-3), tras una doble falta y una derecha a la red del austríaco. Con un tenis seguro a la par que eficiente, el georgiano no tuvo ningún problema para confirmar su ventaja y hacerse con el primer parcial por 6-4 tras media hora de juego. 

Thiem no reacciona y Basilashvili confirma la sorpresa

No hubo ninguna reacción por parte de Dominic Thiem tras perder el primer parcial. Al contrario, el austríaco cedió la iniciativa más pronto, si cabe, en el segundo set. Antes del primer descanso, Thiem ya había vuelto a perder su servicio y en esta ocasión tras desperdiciar un 40-0 a su favor. 

Esta es la segunda victoria de Basilashvili sobre un top10, tras la que consiguió ante el checo Tomas Berdych en Viena el año pasado​Sólo ya al final del partido y cuando se encontraba al límite de la derrota fue cuando el primer favorito del torneo tuvo su única opción de reengancharse al partido. Primero, al salvar dos puntos de partido con su servicio con 3-5 abajo y después al disponer de tres bolas de break cuando su rival se disponía a sacar para el partido. Decir también que el encuentro se paró momentáneamente sacando Basilashvili con 15-30 en ese mismo juego debido, en principio, a disturbios provocados por varias personas presentes en la pista. Sea como fuere, el georgiano supo salvar con aplomo esas tres opciones de rotura y sentenció en su cuarta oportunidad el encuentro y su pase hacia los cuartos de final del torneo. 

Se trata, hasta el momento, de la victoria más importante de la carrera de Nikoloz Basilashvili. Un partido que deja muy tocado a Dominic Thiem, que tendrá que trabajar mucho más duro para encontrar las mejores sensaciones con su raqueta, unas sensaciones que, por el momento, han desaparecido.