El partido enfrentaba a dos tenistas con estilos de juegos muy diferenciados. Müller basa su juego en el servicio, y a partir de este golpe subir a la red el máximo de veces posible por lo que los puntos son cortos y haciendo que el rival se sienta incómodo en la pista al no haber un gran ritmo de juego. Por su parte Nishikori basa su juego en la solidez desde la línea de fondo y en puntos más largos. Si bien el saque no es su mejor golpe, sabe cómo colocarlo para luego sacar ventaja de sus golpes.

El partido siempre estuvo del lado de Kei

Y es que ya desde el primer momento el tenista nipón impuso su ritmo de bola y no permitió en ningún momento que Giles tuviera un respiro. El primer break en favor del japonés llega en el tercer juego cuando el cabeza de serie número 25 desaprovechaba una ventaja del 40-15 en el marcador para acabar cediendo su servicio. Nishikori se creció confirmando el break logrado en el juego anterior y llevando su juego a cotas altísimas, algo que Müller no pudo contrarrestar por lo que volvió a ceder su saque y, como ya ocurriera anteriormente, el japonés volvió a confirmar la rotura de servicio. A continuación el tenista de Luxemburgo pudo ganar su segundo juego al servicio, para que a continuación el tenista nipón cerrara el set por un amplio resultado de 6-2.

Nishikori se creció en el segundo set

El comienzo del segundo set fue un calco del anterior parcial, con Nishikori dominando en el marcador y Müller siempre por detrás en el mismo cediendo con relativa facilidad su servicio. Ya en el primer juego, Kei ya se había adelantado en el marcador rompiendo el saque al de Luxemburgo, pero en esta ocasión no dejaría que el japonés se fuera en el marcador con tanta facilidad hasta en el sexto juego que es donde el nipón volvió a apretar el acelerador y comenzó a gustarse dentro de la pista, mientras que Giles se limitaba a correr detrás de la pelota e intentar ganar el máximo de puntos posibles, aunque fuera una tarea bastante complicada.El resultado del primer set se volvió a repetir, 6-2.

En una hora y diez minutos Nishikori ya se había clasificado para la siguiente ronda de Indian Wells tras superar a Müller por 6-2 y 6-2. Un partido fácil que sirvió a al japonés para coger ritmo de cara a próximos partidos más duros y con rivales de mayor entidad o nivel.

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