Adrián Mannarino avanzó a la tercera ronda del Masters 1000 de Montreal con una impresionante victoria por 6-4 6-4 sobre el principal favorito local Milos Raonic. El francés no tuvo piedad ante un canadiense bastante errático y que se presentó fuera de su esquema habitual de juego, con muy baja efectividad de saque. Mannarino supo responder con constancia y el manejo de los ritmos el partido para sacar el triunfo en sets corridos. Una hora y quince minutos necesitó para sellar su boleto a la tercera ronda del torneo canadienseEl arranque mostró en compacto lo que terminó siendo el partido para un Raonic totalmente desenfocado de su juego. Con cuatro errores no forzados entregó su servicio para darle a Mannarino la primera ventaja en el marcador.

Por momento, el canadiense fue tomando ritmo en el desarrollo del encuentro. Logró la ruptura en el octavo juego para emparejar las acciones en el primer set tras una bola cortada de revés por la parelela que terminó superando en la red al francés. Sin embargo, los errores volvieron a aparecer para el local y nuevamente Mannarino capitalizó para sumar su segundo quiebre en el set y con ello tener la oportunidad de sacar para ganarlo, la cual capitalizó al ganar en el último punto con un globo de revés que superó a Raonic.

Efectivo y constante, Mannarino hizo mayor daño al saque que el propio Raonic y en la devolución capitalizó la debacle de su rival para concretar las únicas dos ocasiones de quiebre en el primer parcial. Para el segundo set se mostraron algunos indicios de mejoría para Raonic, pero no fueron suficientes. El servicio no apareció en su máximo esplendor para el canadiense que apenas logró su primer saque ganador en el noveno juego de este parcial, uno que terminó perdiendo producto de sus errores para darle la gran oportunidad a Mannarino de cerrar el partido.

Nuevamente el francés capitalizó la ventaja con su servicio y con un tremendo saque abierto con bastante efecto que no tuvo respuesta efectiva del canadiense se impuso con el resultado final de 6-4 6-4. El manejo de los espacios de la cancha, la variación constante del ritmo y la minimización de errores fueron los tres factores claves en el resultado de Mannarino, quien enfrentará en la próxima ronda el surcoreano Hyeon Chung.