Choque por todo lo alto en Montreal, la pareja número uno mundial se enfrentaban a los veteranos Marach y Pavic en un partido de altos de altos vuelos y gran calidad técnica dentro de la modalidad de dobles. El choque comenzó con ambas parejas testándose en sus servicios, los dos primeros juegos fueron una toma de contacto de por donde podían ir los derroteros durante el resto del encuentro, con puntos cortos y agresividad en la red.

Fue en el tercer turno de saque y con servicio del Finlandés Kontinen donde se produjo la primera contingencia del choque, los favoritos al título y vigentes campeones del abierto de Australia desperdiciaron un 40-15 y en el punto decisivo el pulso le tembló al escandinavo ya que con una doble falta regaló el 2-1 a sus rivales que, sin embargo no supieron aprovechar la tempranera ventaja ya que en el juego posterior se produjo exactamente la misma situación, siendo esta vez obra de Marach la doble falta que situaba el 2-2 en el luminoso.

Pavic y Peers tiran del carro

Con este caótico inicio de choque fueron los a priori segundos espadas de sus respectivas parejas los que tomaron las riendas de las mismas, primero fue Peers el que sacó adelante su servicio en blanco con cuatro saques ganadores consecutivos y posteriormente Pavic el que daría la réplica con un juego que si bien no fue tan impoluto si logró la misma efectividad que el de su oponente restableciendo la igualada en el marcador. La tónica de juego que marca los estándares del tenis en el dobles se mantuvo, los siguientes puntos se sucedieron rápidos, registrándose hasta cuatro juegos seguidos ganados en blanco todo ello gracias a vistosas acciones de saque y red. En un visto y no visto el set se abocaba a su inmediata resolución con una igualdad máxima: 5-5.

Cuando más apretada estaba la situación, cuando más pujaban por la victoria la pareja líder del circuito mundial Pavic y Marach, vigentes subcampeones de Wimbledon sacaron a relucir todo su potencial En un Tie-Break de infarto lograron adjudicarse el primer parcial luego de imponerse en la muerte súbita por un marcador de 11-9 después de salvar hasta seis bolas de set y de necesitar otras cinco portunidades para adjudicarse la primera manga.

Con la moral por las nubes

Con una gran confianza fruto de la victoria en el primer set Pavic y Marach comenzaron con fuerza y determinación en la reanudación del partido, con cuatro golpes ganadores sellaron su primer turno de saque, y sobre el servicio de Peers forzaron el punto de desempate que finalmente caería del lado de sus rivales.

La sensación de dominio de Marach y Pavic iba sin embargo a durar no demasiado, Kontinen y Peers despertaron tras verse en una situación harto complicada y rompieron el saque del austriaco para luego consolidar el break con suficiencia, estableciendo así el 3-1 en el marcador. Este partido no obstante era de idas y venidas y tan pronto cogieron ventaja como la desaprovecharon para de nuevo volver a adquirirla, los breaks se sucedían pero la ventaja seguía siendo de los número uno mundiales que estaban con 4-3 y saque a su favor. 

Marach y Pavic, el ave fénix 

Con 5-3 tuvieron una bola de set que Marach y Pavic salvaron en el punto decisivo. El perdonar esta gran oportunidad sin duda les pasó factura ya que psicológicamente mermados perdieron el break favorable y dieron alas a sus rivales que renacidos de sus cenizas cuales aves Fénix recobraron el mando en el marcador, poniéndose por delante (6-5) en el momento indicado y asestando el golpe definitivo desde el resto para llevarse el segundo set por 7-5 y con ello el encuentro accediendo con ello a semifinales donde se las verán con la pareja francesa Mahut/Herbert que en su duelo de cuartos se deshicieron de Bob y Mike Bryan.