Las condiciones climáticas de ayer, retrasaron algunos de los partidos agendados en la jornada del jueves del octavo Masters 1000 del año en Cincinnati, la antesala del US Open. Eso hizo que Nick Kyrgios, un jugador bastante particular del circuito y el croata Karlovich, subcampeón de la Davis en 2016 tuvieran que jugar su partido esta tarde. El ganador volvería a la cancha por la noche. Así corren los tiempos.

La gira de torneos en tierras norteamericanas arrancó allá por mediados de julio, en Atlanta, en el que Kyrgios no participó, pero fue campeón el año pasado, luego el australiano llegó hasta la segunda ronda de Washington, donde se retiro en el partido que disputaba frente a Tennys Sandgren (130°) En Montreal perdería en esta misma instancia ante la revelación, el "Next Gen", Alexander Zverev (7°). 

Ivo Karlovich llegó hasta los cuartos tras vencer a el Checo Jiri Veseley (52°) y al francés Jo - Wilfred Tsonga (12°), para acceder a los octavos donde hizo partido pero no pudo contra un Kyrgios, que bien podría dar una gran batalla esta misma noche a un grande como Rafael Nadal (2°), quien a partir del lunes será el número uno, después de mucho tiempo. 

El partido se jugó hasta el tercer set. Ambos mostrando facetas de buen tenis. El australiano es especialista en canchas duras y salió a demostrar su buen potencial, con la mira puesta en llegar de la mejor forma al último Grand Slam del año. Por su parte, Ivo Karlovic logró 28 aces en el partido, un buen porcentaje de puntos ganados con el primer servicio, 80% y salvó casi todos las oportunidades de quiebre de su rival. De hecho el primer set quedó en manos del croata que le disputó todos los puntos y se llevó el primero, por 6-4, tras el noveno game.

El segundo fue la recuperación de Kyrgios, quien llevó el partido hasta el 10 game, consiguiendo además tres de ellos sin ceder ni un punto. Así llevo el partido a un Tie Break, donde logró quebrar en tres oportunidades, para emparejar el encuentro con ese 7-6(6).

El último set, el ganador de tres títulos ATP en 2016 lograría la ventaja con un quiebre en el cuarto game y quedaría 3-1. Ventaja casi definitiva pensando en los juegos siguientes, que sellaron el partido con un 5-2 casi irreversible. Perdería el siguiente, pero cerraría el partido con su servicio y un 6-3. Ahora toca Nadal, esta misma noche. Una promesa de buen partido contra el Mallorquín, que vuelve a mirar a todos desde arriba y querrá confirmarlo ganando el este torneo y el US Open, claro ahí también esta Roger Federer. También una prueba para Kyrgios, que quiere salir de malos tragos anteriores, para preparse antes del Grand Slam americano.