Gael Monfils arranca con fuerza el último Grand Slam de la temporada. El jugador francés, con confianza y saber estar, ha vencido en primera ronda a su compatriota, Jeremy Chardy, 7-6 6-3 6-4 en dos horas y diez minutos de juego. Uno de los tenistas más enérgicos del cuadro masculino y que siempre hace gala de ello, se medirá en la siguiente ronda a Donald Young, que ha vencido al joven alemán Maximilian Marterer, en cuatro sets (6-3, 1-6, 6-1 y 6-4).

Chardy aprieta, pero no ahoga

El encuentro no empezó de manera plácida para Gael Monfils, pues Jeremy Chardy estaba más cómodo sobre la pista del US Open, y nada más comenzar incluso dispuso de un punto de break y ganó su primer servicio muy fácil. Monfils tardó en arrancar, y no se vieron señales de su juego hasta cuando fue capaz de disputarle en un juego largo el segundo saque de su rival

La igualdad se instaló en los siguientes puntos, y ambos tenistas solventaban con rapidez sus respectivos saques. Pero, de repente, el partido se le puso cuesta arriba a Monfils, que perdió su saque de manera inesperada y ponía todo en las manos de Chardy, que sacaba para solventar el set. La calidad de Gael Monfils, entonces, salió a relucir, y supo darle la vuelta de la mejor manera al encuentro, le devolvió el break a su compatriota. El tie-break decantó el partido de su lado, y ese fue el punto de inflexión para que el tenista ganara confianza.

Largas disputas en el segundo set

En el segundo set, Monfils no opuso problemas en el primer servicio de Jeremy Chardy, y esto hizo que su rival cogiera confianza y luchara de gran manera los juegos. Chardy no se rendía, se veía con opciones, y ya en el primer saque de Monfils, dispuso de un punto de rotura, que no supo aprovechar.

Por su parte, Monfils no supo responder igual, y los saques de su rival apenas duraban la mitad que los suyos. Y a pesar de ello, Gael Monfils rompió el servicio del tenista francés de Pau (2-3). Chardy iba detrás en el marcador, pero no cambió su táctica en ningún momento, excepto en el final del set, cuando fue Monfils el que solventó rápido su saque, y opuso lucha al de su rival, que tuvo como resultado el juego más largo del partido, salvando Chardy tres bolas de set, aunque a la cuarta fue la vencida (6-3).

Chardy no se da por vencido

Tras dos sets para Gael Monfils, muchos podrían haber salido del encuentro, pero Jeremy Chardy estuvo muy lejos de hacerlo. Los primeros servicios no tuvieron mucha disputa entre los dos, incluso ya tuvo oportunidad de rotura Monfils en el segundo saque de su rival, pero este lo salvó. Y desde este instante, los juegos se volvieron más largos.

Y tuvo que ser de nuevo un break lo que despertara a Chardy. Monfils se adjudicó el primero, pero Jeremy Chardy apareció sobre la pista con el nivel de los otros sets y le devolvió la moneda a su contrincante con una rotura. Chardy tenía vivas sus esperanzas, pero Gael Monfils era consciente de ello, y actuó como le tocaba. Le complicó el servicio a su rival, y este, ya agotado, ya se rindió a falta de dos juegos para el final (6-4).