El último Gran Slam de la temporada está dejando numerosas sorpresas en ambos cuadros, pudiendo considerarse una de ellas la irrupción del tenis estadounidense en categoría femenina. Pese a la ausencia de Serena Williams y la temporada irregular de otras jugadoras norteamericanas, los aficionados están presenciando en Nueva York la fiesta del tenis de Estados Unidos. Y es que de las 16 jugadoras que conforman la cuarta ronda del US Open, cinco pertenecen al país de las franjas y estrellas, conformando uno de los mejores resultados cosechados por tenistas locales en un torneo de tal calibre. 

Estado de forma

La última en sumarse a la fiesta estadounidense fue Madison Keys, que cerró el sexto día de competición con una trabajada victoria ante Elena Vesnina. La rusa había alcanzado la tercera ronda del torneo y se encontraba en un buen momento de forma, situación que reflejó en los primeros compases del encuentro. Muy segura desde el fondo de la pista y maximizando cada error de Keys, Vesnina comenzó el partido rompiendo el servicio de su rival, una ventaja que amplió posteriormente con su servicio. Lejos de relajarse y limitarse a intentar ganar con su saque, la jugadora rusa volvió a conseguir el ‘break’, colocando un contundente 3-0 en el marcador y disponiendo de su saque para dejar prácticamente cerrado el primer set.

Vesnina logró dos parciales de 3-0 que le dieron el set

Sin embargo, espoleada por su público, Madison Keys comenzó a conectar golpes ganadores y aumentó su efectividad y su agresividad en los golpes, cambio de estrategia que le proporcionó resultados inmediatos. Así, la estadounidense recuperó uno de los ‘breaks’ perdidos y posteriormente se impuso sin demasiados problemas con su saque, apretando el marcador y traspasando toda la presión a su oponente, que había visto cómo su ventaja ahora era de tan sólo un juego.

Pero en este deporte tan mental como el tenis, cualquier pequeño bajón pasa factura, y buena prueba de ello fueron los tres juegos siguientes para la tenista estadounidense. Sin un motivo aparente, la norteamericana volvió a su versión del inicio del encuentro y Vesnina fue sintiéndose cada vez más cómoda sobre la pista, lo que se tradujo de nuevo en un parcial de 3-0 que esta vez sí cerraba definitivamente la primera manga con un marcador de 6-2 favorable a la jugadora europea.

Keys asume el mando

La situación cambió radicalmente en el segundo parcial. Ambas jugadoras elevaron ligeramente su nivel y mantuvieron sus respectivos servicios en el primer turno para, a continuación, pasar al mejor momento del encuentro para Keys. La estadounidense encadenó tres juegos consecutivos (rompiendo el servicio de su rival en una ocasión) y logró una ventaja sustancial que invitaba a pensar que el partido se resolvería en el tercer y definitivo set. 

La estadounidense logró 29 ganadores por diez de su rival

De nuevo esta ‘montaña rusa’ tenística se hizo patente en el Arthur Ashe Stadium, pues cuando más cuesta arriba tenía el set, Elena Vesnina consiguió devolver ese ‘break’ e igualó la contienda para situar el 4-4 en el marcador y quedarse a tan sólo dos juegos de firmar su presencia en octavos de final del US Open 2017. Sin embargo, el buen hacer de la jugadora estadounidense y la gran cantidad de errores no forzados hicieron mella en la rusa, que cedió su saque en el décimo juego del set para acabar perdiendo por 4-6.

La gran incógnita en los sets decisivos suele ser el aspecto mental, y pese a que la inercia positiva correspondía a Madison Keys, habría que comprobar sobre la pista quien se hacía con el control del encuentro en esta tercer manga. Pero las dudas quedaron resueltas inmediatamente. Sin dejar de ser fiel a su estilo agresivo y de búsqueda de golpes ganadores, la jugadora estadounidense comenzó el tercer parcial con un contundente 5-0 que dejaba prácticamente sentenciada su presencia en la cuarta ronda del torneo. Elena Vesnina se apuntó el sexto juego, pero Keys no desaprovechó la primera oportunidad que dispuso para finiquitar el encuentro con 6-1 en el marcador y alcanzar los octavos de final del US Open, donde se enfrentará a la ucraniana Elina Svitolina.