La selección francesa de Copa Davis volverá a disputar una final tres años después. Los pupilos de Yannick Noah sentenciaron su eliminatoria de semifinales en la tierra batida de Lille con el tercer punto que logró el número uno galo, Jo-Wilfried Tsonga, al vencer al serbio Dusan Lajovic por tres sets a uno. 

Números muy parejos entre ambos jugadores: 44 errores no forzados para ambos pero Tsonga prevaleció en golpes ganadores, 38 por 34En el encuentro entre los dos números uno de sus respectivos países, Lajovic dejó claras sus intenciones desde el principio. El serbio salió en tromba y se llevó el primer set por 6-2 tras romper en dos ocasiones el servicio de un Tsonga que todavía no había entrado en el partido. El tenista local reaccionó rápida y contundentemente en el segundo set devolviendo el 6-2 de la primera manga a su rival. El francés despertó tras un primer parcial horrible y comenzó a conectar con el público local, algo siempre decisivo en un torneo como éste. 

Tsonga coge el mando 

Tras dos sets muy desiguales, el tercero fue completamente diferente. Ambos jugadores sabían de la importancia de ganar este parcial y la igualdad fue extrema. Lajovic fue el único que dispuso de bolas de 'break', dos concretamente, en el noveno juego. De haber aprovechado alguna de ellas, el balcánico hubiera dispuesto de su servicio para hacerse con el set pero en ese momento salió la mejor versión de Tsonga, un jugador que siempre se motiva en los grandes escenarios y que, de la mano de su servicio y su potente 'drive' salvó ese apuro para terminar llevándose esta decisiva manga por 7-5 en el desempate. 

Francia jugará en casa si su rival termina siendo Bélgica. Por contra, si es Australia, la final se disputará en suelo oceánicoLajovic acusó mucho el golpe moral del tercer set y ya no volvió a reaccionar. El cuarto y, a la postre, último set fue un paseo para un Tsonga que, a estas alturas del partido, se encontraba ya totalmente suelto y en gran armonía con su público al que deleitó y puso en pie con varios puntos espectaculares. Lajovic tampoco encontró la ayuda de su capitán, un Nenad Zimonjic demasiado apagado y que parecía ya claramente derrotado, lo que contrastaba con la característica exuberancia de Yannick Noah, su homólogo francés. Su jugador repitió el 6-2 cosechado en la segunda manga y con ello dio el pase a su país a la que va a ser la decimoctava final de Copa Davis para Francia, en la cual buscará ese ansiado décimo entorchado que continúa resistiéndose desde el año 2001

Francia ya espera rival para el fin de semana del 24 al 26 de noviembre. Rival que saldrá de la semifinal que siguen disputando en estos momentos las selecciones de Bélgica y Australia, con un 2-1 favorable momentáneamente para los segundos. 

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Sobre el autor
Manuel García
Licenciado en Periodismo por la Universidad Complutense de Madrid.