Partido de primera ronda del ATP 250 de Amberes, Bélgica. Se enfrentaban por primera vez, el español David Ferrer, cabeza de serie número cinco del torneo y 31º del ranking mundial, al otro lado de la red, el italiano Stefano Travaglia, 131 de la ATP.

Sorpresa en el primer set

El italiano salió sin complejos, quizás sabiendo que el español no está en el mejor momento de su carrera. Ferrer este año no está cuajando grandes resultados y se ha visto mermado por las lesiones. En el cuarto juego, sacando David, el italiano le forzó a salvar una bola de break. Rotura que si lograría convertir en el siguiente turno de servicio, se adelantó cuatro a dos. Ferrer reaccionó y recuperó el saque roto en el siguiente juego. Luego el marcador se mantuvo igualado hasta el cinco a cuatro y saque para el alicantino. Travaglia se mantuvo concentrado y consiguió romper de nuevo el saque de su rival haciéndose así con la primera manga.

En el segundo set, David salió con mas energía. En el tercer juego consiguió ponerse por delante arrebatando el servicio del italiano. Con el tres a uno a su favor, el español se sentía mas cómodo y soltaba mejor el brazo moviendo a su rival de lado a lado. Los juegos seguía sumándose a su marcador hasta alcanzar un contundente cinco a uno. Con el cinco a dos y su servicio, Ferrer dispuso una bola de set, esta fue salvada por el italiano y recuperó uno de los breaks que tenía de desventaja. Con el cinco a cuatro y su saque para cerrar el set, David no dudó esta vez y consiguió cerrar la segunda manga.

Los dos guardaron lo mejor para el final

Al contrario que en los dos sets anteriores, los dos esta vez no daban opciones al restador. El set se mantenía siempre igualado. Con los dos tenistas dando lo mejor de su tenis y un público agradecido por el esfuerzo de ambos. El italiano se puso cinco a cuatro y se disponía a cerrar el partido al resto, estuvo muy cerca de coseguir dar la campanada al disponer de una bola de partido. Ferrer la salvó con valentía cerrando el punto en la red con una gran volea de revés. El partido ya se veía sentenciado a resolverse en el tie break final. En la "muerte súbita", los dos llegaron con un tres iguales en su marcador. A partir de ahí, el de Jávea consiguió encadenar cuatro puntos consecutivos y apuntarse la victoria final en un partido muy exigente.