Luego de una larga y complicada lesión, la estadounidense que cuenta con un exultante presente y un mejor futuro por delante tuvo un regreso soñado al circuito en la temporada 2017, proclamándose campeona en el Abierto de los Estados Unidos. La escalada épica y monumental que consiguió en el ranking WTA (ascendió 950 puestos en un mes) no fue suficiente para ganarse un lugar dentro de las ocho mejores del mundo y lograr el boleto que le permitiera jugar el torneo de Singapur que finalizó el día sábado con el triunfo de Caroline Wozniacki sobre Venus Williams.

Sin embargo, el tenis femenino cuenta –desde hace tres años- con un torneo posterior que reúne a las doce mejores jugadoras por detrás de aquellas que estuvieron presentes en Singapur. Y una de ellas es la propia Stephens, que merecidamente tuvo su recompensa y accedió al certamen WTA Elite Trophy Zhuhai. La actual trece del mundo es quizás la más candidata al título por el enorme crecimiento que ha tenido en los últimos torneos.  La fortaleza mental y la inteligencia para desenvolver golpes fueras de serie hacen que la joven norteamericana sea una de las tenistas más compactas y peligrosas del circuito.

Desplegando un tenis descomunal en su tierra natal y alcanzando victorias espectaculares, Sloane se ganó el apoyo incondicional del emblemático estadio Arthur Ashe que se rindió a sus pies luego de la obtención del tan ansiado y prestigioso Us Open. La tenista afroamericana, nacida en Florida,  venció nada menos que a Venus Williams en la semifinal y a su otra compatriota, Madison Keys, en la final del torneo para confirmar la vuelta al circuito de una jugadora implacable que sin dudas permanecerá en lo más alto del ranking por muchos años.

¿Es Stephens la principal aspirante al título? El torneo chino, que se realiza por tercera vez en su historia, se lleva a cabo con la conformación de doce tenistas, las cuales están divididas en cuatro grupos de tres integrantes, con una sola plaza disponible hacia las semifinales. La joven de 24 años de edad quedó situada en el grupo "Camelia" y luchará por avanzar de fase ante  rivales de gran porte como la letonia Anastasija Sevastova y la checa Barbora Strycova.

El presente, la sabiduría y la mentalidad ganadora que caracteriza a Stephens a la hora de afrontar partidos importantes, la colocan en una situación de privilegio y, por supuesto, que las miradas estarán puestas en ella por lo que supo demostrar en toda la temporada 2017. La suerte está echada y será el momento de culminar un año que quedará en el recuerdo permanente de una tenista joven que se convirtió en adulta por los duros momentos que debió atravesar hasta finalizar haciendo historia en Flushing Meadows, cuando levantó el trofeo de su vida con una sonrisa imborrable que reinará por el resto de la eternidad.