El tenista Roger Federer ha sido elegido como doctor honoris causa por la Universidad de Basilea. En la ciudad que le vio nacer hace treinta y seis años, Roger recibió el título que sin duda premia su magnífica carrera deportiva y la labor que realiza con su fundación para transmitir la salud a través del deporte.

Federer agradeció el premio y reconoció que la emoción era la misma que tras ganar un Grand Slam: "Muchas, muchas gracias por este premio. Es un enorme honor estar aquí con todos vosotros. Cuando comencé a jugar al tenis, nunca fue mi objetivo recibir esta distinción de la Universidad de Basilea. Pero me alegro muchísimo, me siento igual de feliz como si hubiese ganado un Grand Slam", dijo el suizo en un vídeo, pues no pudo asistir a la gala ya que se encuentra de vacaciones con su familia. Vacaciones merecidísimas después de la gran temporada que ha realizado ganando siete títulos, dos de ellos Grand Slam, y haber terminado en la segunda posición del ranking.

La Facultad de Medicina de Basilea fue la encargada de otorgar el distintivo y agradeció a Federer su aportación al renombre de la ciudad y del país, su civismo en el deporte y su compromiso para con los niños más necesitados de África, trabajo que realiza a través de su fundación ‘Roger Federer Fundation'.

La universidad también manifestó que: "Roger es un ejemplo para cualquier deportista. Alienta a muchas personas por todo el mundo a hacer más ejercicios físicos, y por lo tanto, hace una contribución importante a la promoción de la salud". Además del tenista, otras dos personalidades que también recibieron el título de doctor honoris causa fueron el presidente del Swiss National Bank, Thomas Jordan, y Andrew Bond, un músico suizo conocido por sus canciones infantiles.