Carla Suárez Navarro, número 39 en el ranking de la Asociación Femenina de Tenis (WTA), venció ayer, en la primera ronda del Abierto de Australia, a la polaca Magdalena Fręnch, N° 163, por 7-5 y 6-3, y se instaló en la próxima instancia, donde chocará frente a la húngara Timea Babos, N° 51, quien venció a la norteamericana Coco Vandeweghe, N°9, por 7-6(4) y 6-2. El partido se disputó en la la cancha 19 del complejo Melbourne Park, y duró una hora y 32 minutos. El duelo se desarrolló con paridad y con demasiadas rupturas de saques debido a la dureza con la que ambas jugadores se desempeñaron, pero con el transcurrir del tiempo, el encuentro se fue inclinando para el lado de la española.

El set inicial empezó sumamente igualado. Luego de que la polaca sostuviese su primer juego de servicio a cero, Suárez Navarro debió afrontar un 40-40, del cual pudo salir airosa. Fręnch se colocó en ventaja después de aprovechar la primera oportunidad de break que su rival le otorgó en el cuarto game. Pero rápidamente, la nacida en Las Palmas de Gran Canaria respondió y quebró el siguiente servicio de su oponente. Las emociones bajaron un poco su intensidad en los subsecuentes tres juegos, porque ambas tenistas mantuvieron sos saques sin problemas. Cuando el marcador se encontraba 4-4, Navarro dispuso de dos posibilidades de ruptura a su favor que no supo concretar, pero que funcionaron como un aviso de que lo vendría.

Tras conservar su saque, e igualar el juego en 5-5, la ibérica logró hacerse con el servicio de Fręnch y sacar para adueñarse con el primer parcial. Dejando atrás una bola de break en favor de la polaca, necesitó de tres sets points para sellar, en 55 minutos, el 7-5 y quedarse con el parcial inaugural.

La segunda manga se resolvió con mayor facilidad. La N°39 rompió el saque de su adversaria en el game inicial y se adelantó en el tanteador. Perodespués de no poder captar tres oportunidades para equiparar el partido, la oriunda de Lódz recobró el quiebre en el sexto juego del set y estableció el 3-3. Sin embargo, la felicidad de Fręnch perduró poco a causa de que Suárez Navarro se adjudicó los posteriores dos servicios de la polaca para decretar, en 37 minutos, el 6-3, conquistar el último parcial y ganar el encuentro.

De esta manera, la española, quien intentará superar la barrera de los cuartos de final, instancia que alcanzó en dos ocasiones (2009 y 2016) y que hasta el momento es su mejor resultado en el certamen, avanzó a la siguiente ronda del Abierto de Australia, en donde se verá las caras ante la húngara Timea Babos, quien derrotó a Coco Vandeweghe por 7-6(4) y 6-2. Será el primer enfrentamiento entre ambas.