Mañana arranca otra edición de la Copa Davis, y un año más España buscará volver a la élite del Grupo Mundial con tal de recuperar una hegemonía perdida en los últimos años debido a las ausencias de las mejores raquetas de nuestro país. Una de ellas es la de Roberto Bautista, actual número 23 del ránking ATP, que este año sí ha acudido a la llamada de la "Armada" y de su nuevo capitán, Sergi Bruguera.

Analizamos como llega a esta primera cita importante el tenista español, que ha empezado este año 2018 con buen pie y unos resultados notables. Tras disputar el torneo de exhibición en Abu Dhabi (con victorias ante Rublev y de un set ante Murray), Bautista llegaba a Pune para disputar su primer torneo ATP 250. Con su condición de cabeza de serie, quedaba exento de disputar la primera ronda. Su rival en octavos de final sería el francés Gilles Simon. El español fue incapaz de imponer su ritmo de juego y Simon consiguió una sorprendente victoria en dos sets. 

Sin duda no era el mejor arranque oficial para el español, que se presentaba en Auckland a la semana siguiente sin las mejores sensaciones antes del primer grande del año. Sin embargo, todo el mundo conoce la perseverancia de Roberto, y en tierras neozelandesas se pudo ver como poco a poco iba reencontrándose con su mejor juego. La progresión en el torneo fue de menos a más, empezando con una victoria fácil ante el local Michael Venus, para después disputar tres duros enfrentamientos ante Steve Johnson, Jiri Vesely y Robin Haase. Durante los tres partidos, Bautista tuvo altibajos pero a nivel general se pudo ver una gran mejora. En la final esperaba el gran favorito, Juan Martín del Potro. El choque fue del más alto nivel entre dos tenistas que buscaban el primer título del año, que finalmente cayó del lado del español después de tres apretados sets.

Así, Bautista conseguía pasar del infierno al cielo en poco más de una semana y se presentaba al Open de Australia con un gran nivel de juego y una confianza total. Sin embargo, el sorteo para él no fue el mejor posible, ni mucho menos. Y es que en primera ronda tuvo que enfrentarse a su compañero y amigo Fernando Verdasco. El madrileño, con más días de descanso y mejor aclimatación a las pistas de Melbourne, se llevó el partido en cuatro sets y desplegando un gran juego, sin apenas conceder opciones a Roberto.

En lo que a trayectoria en Copa Davis se refiere, Bautista debutó ante Alemania en 2014, y desde entonces ostenta un récord de 6 victorias y tres derrotas repartidas en cinco eliminatorias. Su peor recuerdo es sin duda la derrota ante Thomaz Bellucci en 2014, que suponía el descenso del equipo español al grupo I. Pero desde entonces, el español se mantiene invicto con cinco victorias consecutivas en tres eliminatorias. Si no hay cambios de última hora, su rival mañana será el joven Cameron Norrie, un debutante en Copa Davis, en el segundo punto de la eliminatoria.