Garbiñe Muguruza firmó otra sólida presentación en el Abierto de Catar luego de su victoria en sets corridos sobre la rumana Sorana Cirstea, abriéndose paso en el torneo para clasificar por primera vez en la temporada a unos cuartos de final. El triunfo de la española fue con parciales de 6-0 6-4 en una hora y cuatro minutos de partido.

Muguruza entró imponiendo el ritmo del partido ante una Cirstea que cometió numerosos errores en la búsqueda de espacios ante la española. El segundo juego del primer set fue el más parejo de este parcial, en el que se puso a prueba el servicio de Garbiñe, pero respondió de manera efectiva para mantener infranqueable su saque. La española ganó todos los juegos del set, sellándolo con un saque directo al centro sobre la línea.

La seguidilla de Muguruza se extendió por dos juegos más, hasta que Cirstea ganó por primera vez su servicio. Ese momento representó un empujón anímico para la rumana, sin embargo la española no se amilanó ante ello al ganar su servicio y quebrar en el juego siguiente el saque a su rival, tomando ventaja de 4-1. Inmediatamente, Garbiñe confirmó esa nueva ruptura, la segunda del set, con su servicio para quedar a un juego de firmar su boleto a los cuartos de final.

El cierre no fue fácil para la española. En su primera oportunidad de saque para ganar el partido entregó su servicio luego de cometer una doble falta. Pasó del dominio 5-1 a sacar con obligación de ganarlo en el 5-4. De cualquier forma, la presencia en cancha de Conchita Martínez le iluminó para lograr el triunfo que le permite igualar su mejor presentación en este torneo (hizo cuartos de final en 2016).

De esta forma, Garbiñe Muguruza logra por primera vez en la temporada ganar dos encuentros consecutivos en un mismo torneo. En apariencia, los problemas físicos de principio de año parecen estar disipados. El próximo desafío revelará con mayor certeza cómo están sus condiciones, cuando enfrente a la francesa Caroline García.