El duelo entre Pablo Carreño y Fernando Verdasco prometía emoción y buen tenis a partes iguales, pero finalmente todos los factores se aliaron con el de Gijón, que terminó imponiéndose con bastante claridad (6-0, 6-3) en poco menos de hora y media de encuentro ante un Verdasco que pudo acusar el cansancio físico y mental de las jornadas anteriores y que terminó requiriendo asistencia médica.
El primer set fue un monólogo a cargo de Carreño, que desde un principio no dio ni la más mínima oportunidad a Verdasco de entrar en el partido. 6-0 en menos de media hora con un Pablo que recordaba por momentos al de las semifinales del pasado US Open. Enfrente, un Verdasco que no conseguía parar el vendaval que le venía del otro lado de la red.
Sin embargo, el segundo set empezaba de manera muy diferente respecto al primero. Carreño entró mucho más relajado después del gran nivel mostrado en el primer parcial y Verdasco no desaprovechó la oportunidad para cobrarse la primera ventaja. El madrileño se colocaba con 2-0 y en el juego siguiente al resto llegó a estar con 0-40, pero ahí despertaba el gijonés con cinco puntos consecutivos. El madrileño ya tuvo que salvar tres puntos de rotura antes de poner el 3-1 en el marcador. El set parecía favorable a Verdasco, pero en ese momento la mala fortuna hizo que sintiera un pinchazo en su gemelo al correr a por una dejada que tiraron por tierra sus esperanzas de remontar el partido. Con un rival en inferioridad de condiciones, Carreño convirtió el 3-1 en el 6-3 final a su favor ante un Verdasco impotente después de la posible lesión.
Carreño se queda ahora como el único español del cuadro. Su rival en cuartos de final saldrá del partido que disputarán el sudafricano Kevin Anderson y el americano Frances Tiafoe, que disputará su segundo partido de la jornada después de verse obligado a terminar el tercer set del partido ante Tomas Berdych, que ayer fue suspendido por las condiciones meteorológicas.