Muchos ya le conocían y eran sabedores de su enorme potencial, pero pocos podían pensar que en este Godó, bautizado como el mejor de la historia, Stefanos Tsitsipas sería capaz de plantarse en los cuartos de final. El griego ha roto casi todos los esquemas y hoy ha conseguido vencer a Albert Ramos (6-4, 7-5), ídolo local de la afición, que ha visto como su compatriota se veía superado por el enorme talento del joven jugador de Atenas.

Tras la decepción por la eliminación de Feliciano López, la afición española esperaba celebrar una victoria en la Pista 1. El partido empezaba bien para Ramos, que conseguía el primer break a las primeras de cambio. Pero ya desde ese momento, Tsitsipas iba a dejar claro que no iba a ser presa fácil y conseguía recuperar el servicio en el juego siguiente. Ya no habría más roturas hasta el juego decisivo del set, donde el griego daría el primer golpe al partido ganando el décimo juego al resto para llevarse la primera manga.

Se le ponía cuesta arriba el partido a Ramos, tal y como le pasó en su debut ante Dutra Silva, donde consiguió remontar un set en contra. Hoy sin embargo, no habría final feliz para el catalán. Tsitsipas seguía muy inspirado en el segundo set y no pasó apuros con su saque en ningún momento, a pesar de que Ramos mejoró sus prestaciones, además de contar con el apoyo unánime del público. Pero el griego supo soportar la presión, y cuando restaba con 6-5 a su favor, tres errores de Ramos han dejado el partido sentenciado.

El griego tendrá mañana una prueba todavía más complicada, abriendo la jornada y jugando por primera vez en la pista central ante Dominic Thiem, que hoy ha eliminado a Jozef Kovalik (7-6(5), 6-2).

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