Una de las primeras sorpresas del recién comenzado torneo de Wimbledon ha sido la holgada victoria de la croata Donna Vekic a la estadounidense y número cuatro del mundo Sloane Stephens en dos sets corridos (6-1, 6-3). Al contrario de lo que pudiera parecer, ya que Stephens llegaba a este partido tras haber salido subcampeona de Roland Garros, la jugadora croata ha sorprendido solventando su partido de forma rápida y sencilla y dejando un buen sabor de boca.

El primer set empezaba igualado, con las dos jugadoras conservando su saque, pero en el cuarto juego Vekic ya lograba hacer break, hecho que repetiría posteriormente en el sexto juego. La estadounidense no aprovechó la única bola de break que tuvo en el primer set. La croata cerraba este set en tan solo 26 minutos, con un porcentaje muy elevado de puntos ganados con el primer servicio (88%) y destacándose como dato negativo las cuatro dobles faltas cometidas.

Parecía que en el segundo set Stephens podía ir camino de la remontada, ya que empezaba ganando su primer juego en blanco al saque y además rompía el servicio, también en blanco, a su rival. Pero Vekic respondía fuerte y recuperaba el break. En el quinto juego del segundo set Vekic ya encarrilaba el partido, y su victoria parecía estar cerca, pero la americana intentaba aferrarse lo máximo posible al encuentro. Sería en el noveno juego de este set cuando la croata tendría varias bolas de partido, hasta que pudo hacer eficaz la cuarta de ellas y cerrar el partido con muy buenas sensaciones y con un revés paralelo muy potente.

El único aspecto negativo en la jugadora croata ha sido la cantidad de dobles faltas que ha cometido a lo largo del partido, con un total de nueve.

Donna Vekic pasa a siguiente ronda de Wimbledon derrotando a una de las mejores tenistas del circuito de la WTA y se enfrentará a la vencedora del partido entre Kuzmova y Peterson.