La consecución del trofeo fue el broche de oro a la gran semana que hizo Sevastova en Bucarest, en la cual solo cedió dos sets durante todo el torneo. El primer set supuso una gran igualdad entre ambas tenistas, dando la sensación de que el partido se podría decantar a favor de cualquiera de las dos gracias al más mínimo detalle. Sin embargo, en el segundo set, la calidad de Sevastova sumado a la poca oposición por parte de Martic acabaron decantando el segundo set y con ello el título a favor de la tenista letona.

Pese a que las dos tenistas habían realizado un gran torneo, Sevastova partía con un ligero favoritismo, debido a ello, saltó la sorpresa cuando en el tercer juego le rompían el saque sin que pudiera mostrar mucha resistencia. A partir de entonces, el saque dejo de ser un arma en la cual confiar ya que las dos tenistas perderían sus siguientes tres juegos al saque. Los errores no forzados y la poca seguridad que tenían en sus saques comenzaron a ser recursos más que recurrentes en el partido. De tal manera, no fue hasta el decimoprimer juego que Sevastova consiguió volver a defender un saque, eso sí, le conllevó un gran esfuerzo ya que tardó 12 minutos en llevarse el juego, cediendo cuatro oportunidades de ‘’break’’ que conseguiría salvar. Esta igualdad ‘’negativa’’ hizo que se llegara al ‘’tie-break’’. Matic tenía los sentimientos a flor de piel, gritando y golpeando al suelo tras cada fallo. Durante el ‘’tie-break’’ no consiguió hacer acopio de concentración y Sevastova se llevó el set por saber calmar el partido cuando más lo necesitaba. Se acabó llevando el primer set en una hora y cuatro minutos.

La pérdida del primer set afectó mucho a Martic. Mientras que Sevastova cada vez jugaba más cómoda gracias a la ventaja que le daba este primer set, Martic poco a poco entraba en una dinámica negativa de juego de la cual no lograría salir. Si en el primer set veíamos a Martic furiosa tras cada error que cometía o cada golpe que echaba fuera, en el segundo set, la imagen era más bien de desesperación. En el tercer juego perdería su saque a cero y eso fue el golpe de gracia para ella. A partir de aquí, Sevastova hizo lo que quiso con ella, se mantuvo calmada y gracias a los errores de su rival, con mayor confianza a la hora de efectuar dejadas o remates cruzados. En los últimos dos juegos se pudo ver como Martic se limitaba a ver pasar la pelota sin llevar a cabo respuesta alguna. Sevastova se acabó llevando un partido más fácil de lo que a priori era por fallos de la rival más que por acierto propio. El segundo set se cerraría en 28 minutos.

La victoria lograda por Sevastova supone el tercer título en su carrera y le otorga 280 puntos a su ranking y 43.000$. Esos 280 puntos le permitirán avanzar tres posiciones en el ranking una vez se actualice.