Nueva York hoy fue un infierno. Con casi 40 grados en la cancha, Diego Schwartzman le ganó a Federico Delbonis por 6-2, 7-6 y 6-2 en casi tres horas de juego y accedió a la segunda ronda del último Grand Slam del año.

La ciudad de los rascacielos se sintió hoy como pocas veces, sobre todo en Flushing Meadows. Los jugadores que hoy salieron a la pista en los primeros turnos jugaron contra sus rivales y frente a un calor fuera de toda lógica. En ese ardor, se midieron dos compatriotas: los argentinos Schwartzman y Delbonis, con victoria para El Peque en sets corridos.

En el primer parcial el número 13 del mundo pegó primero y quebró rápidamente el saque de su rival. Contra todos los pronósticos, el de menor estatura fue el que tuvo mayor solidez en el servicio. Diego metió el 50% de los primeros saques, pero se quedó con el 91% de los puntos disputados. Delbonis, en cambio, ganó tan solo un 44% de los puntos jugados con su primer servicio, lo que lo llevó a enfrentar varios breaks points en contra. De los cinco que tuvo que defender entregó tres. De esta manera El Peque se llevó la primera manga por un contundente 6-2 en 38 minutos de juego.

En el segundo set la historia fue otra. Las altas temperaturas acechaban a ambos jugadores y la cuestión física pareció emparejar la balanza. La paridad fue total, lo que llevó a una definición en tiebreak. Delbonis tuvo tres oportunidades para poner el marcador set por lado, pero El Peque sacó su chapa de guerrero y levantó uno por uno aquellos puntos. Finalmente Diego cerraría la definición por 8-6 para quedar a un set de la segunda ronda.

En el tercer parcial el esfuerzo de Federico se derrumbó. Nuevamente fue Diego quien tomó las riendas del partido e hizo lo mismo que en el primer set. Superó ampliamente el porcentaje de puntos ganados con su servicio y le arrebató el saque a su compatriota en tres oportunidades. Delbonis quebró el saque de Diego en una ocasión, pero fue anecdótico. El set fue otra vez 6-2 para El Peque en 46 minutos.

Este fue el sexto enfrentamiento entre ambos jugadores, con el historial en favor de Schwartzman 4-2. Cabe destacar que fue el primer duelo en cacha dura. El próximo rival del argentino será Jaume Munar, quien batalló para superar a Ruben Bemelmans por 5-7, 6-3, 7-6, 2-6 y 6-1. En segunda ronda hay batalla asegurada.