Apenas unas horas después de haberse dado el pistoletazo de salida a este US Open, que cumple 50 años en la presente edición, se producía el primer bombazo en el cuadro femenino, y también en el torneo, tras la inesperada derrota de la número uno del mundo, Simona Halep, en el debut ante la estonia Kaia Kanepi.
Esto convertía automáticamente a Caroline Wozniacki en la primera favorita, por ranking, a poder llevarse un US Open que tanto se le resiste, al igual que también se le resistía un torneo de Grand Slam tras conseguirlo al fin en esta presente temporada en el Open de Australia donde derrotó en la final precisamente a la rumana en un partido épico. La ucraniana Lesia Tsurenko, segunda rival para la danesa.
Un comienzo esperanzador…
A diferencia de lo que se acabaría viendo minutos después, el inicio del partido hacía presagiar que la danesa se llevaría, si no el partido, mínimo la primera manga, un avance muy importante en todo partido de tenis que se dispute, pues tras un muy buen comienzo, la nacida en Odense se colocó con el marcador de 3-1 a su favor desplegando un tenis muy eficaz y dinámico.
… pero todo se torció
Una vez subido el tercer juego al casillero de la danesa, la ucraniana despertó y a base de firmeza, energía, potencia y sobre todo confianza, remontó el primer set. Wozniacki peridó precisión y su fluidez en el juego, dando campo y espacio a Tsurenko que, si se encuentra enchufada y cómoda sobre la pista, es una tenista muy peligrosa. Esa combinación de hechos produjo que la ucraniana se adueñase del primer set.
Se estaban observando peloteos y puntos muy bellos, de una gran calidad y con numerosas alternativas para ambas jugadoras. Sin embargo, siempre era Tsurenko quien daba un paso más al frente y quien conseguía golpear de manera más cómoda desbordando así a una Wozniacki que no encontraba su sitio y que sumó la pobre cifra de 6 golpes ganadores, además de los 35 errores no forzados, números escandalosamente extraños en la danesa, por los 20 winners de Tsurenko.
La pista Louis Amstrong, alergia para las dos primeras favoritas
Al igual que sucedió en la jornada de lunes con la reciente pista remodelada Louis Amstrong que observaba como Halep caía a las primeras de cambio, lo mismo estaba a punto de suceder con la favorita número dos del torneo. Wozniacki pudo seguir a la estela de Tsurenko, pero varios errores de bulto propiciaron un segundo break a favor de la ucraniana que prácticamente dejaba a la campeona del Open de Australia los dos pies en la calle.
Minutos antes de llegar a las dos horas de partido, Lesia Tsurenko, con algunos problemas en el brazo derecho, pues necesitó la presencia del fisioterapeuta del torneo, pegaba el segundo gran bombazo del torneo en la rama femenina tras anular a Caroline Wozniacki y acabar venciendo en dos sets por el marcador de 6-4 y 6-2.
Tres derrotas en segunda ronda en los últimos cuatro años
Pese a que la danesa cuenta con dos finales en Nueva York, ambas perdidas con su buena amiga Serena Williams, los últimos números de Wozniacki no son para nada halagüeños ya que ha caído en la misma ronda, segunda, en los últimos cuatro años, a excepción del 2016, en lo que fue un año difícil en lo personal para ella, donde alcanzó las semifinales perdiendo con Angelique Kerber que a la postre acabría siendo la ganadora del torneo.
Primera vez en la historia de la Era Open que las dos primeras cabezas ceden antes de cuartos de final en el US Open
La derrota de Wozniacki provoca que esta sea la primera vez en la Era Open que las dos primeras cabezas de serie han cedido antes de los cuartos de final. De esta manera, ahora es la holandesa Kiki Bertens, flamante ganadora en Cincinnati y favorita Nº13 en Flushing Meadows, la mejor posicionada para alcanzar los cuartos de final donde previsiblemente chocaría con la checa Petra Kvitova, quien nunca ha estado en los cuartos de final del US Open tras haberlo intentado diez veces. El cuadro femenino, como siempre, interesantísimo.