Finalmente, será Croacia la rival de Francia en la final de la Copa Davis 2018. En un dramático quinto punto, el número dos local, Borna Coric, venció a su homólogo visitante, el estadounidense Frances Tiafoe, por 6-7(0) 6-1 6-7(11) 6-1 y 6-4 en más de cuatro horas de continua batalla. Los nervios jugaron una mala pasada a Coric, especialmente en un tercer set que terminó perdiendo tras ir 5-1 arriba, pero su mayor experiencia en este tipo de encuentros y el apoyo de la grada local en Zadar resultó decisiva para inclinar la balanza a su favor. 

Pese a sus 92 errores no forzados, Coric se hizo con el partido. También el croata fue más agresivo, con 44 ganadores por 25 de TiafoeTodavía en estado de 'shock' tras la debacle de Cilic ante Querrey, la responsabilidad de ser el teórico favorito pudo con Coric durante el primer set. El tenista local comenzó nervioso y un tanto precipitado, lo que le valió a Tiafoe para romperle el servicio y ponerse 4-1 arriba. Pese a recuperar el 'break' y llegar a empatar a cuatro, los errores aparecieron nuevamente en la derecha de Coric, una auténtica bomba de relojería en el día de hoy, durante el primer desempate del partido. Con verdadero aplomo y sin rastro de nervios, Tiafoe dejó a cero a su rival y daba el primer paso hacia la victoria. 

El desenlace del primer set se convirtió en un acicate para Coric, que dejó a un lado los 25 errores cometidos y dio un paso adelante para igualar el partido. Tras el esfuerzo del primer parcial, Tiafoe perdió tensión competitiva y encajó un contundente 6-1 por parte del croata, que comenzó con un inapelable 5-0 de salida. Lo mismo pareció ocurrir en la tercera manga. Coric se mostraba cada vez más dominante desde el fondo y los errores habían quedado atrás. El set parecía tener dueño con un 5-1 y 0-30 a favor del tenista local, pero esto es la Copa Davis y la presión y los nervios pueden aparecer en cualquier momento. 

Coric no remató ni a la primera ni a la segunda. En el momento clave, el de Zagreb volvió a arrugarse y con un torrente de errores no forzados, dio la oportunidad a Tiafoe de regresar al partido. Éste remontó y del 1-5 se pasó al 6-5 a favor del estadounidense. En la muerte súbita, los nervios pasaron de una raqueta a otra hasta que finalmente fue Tiafoe el que se hizo con ella por 13-11 en su quinta bola de set. 

Reacción de campeón de Coric

Estaba por ver cómo respondería Coric tras perder un set que tenía en su bolsillo. El croata ya no contaba con margen de error, obligado a ganar los dos siguientes sets para lograr la victoria. Pero lo que quedaba claro es que Tiafoe no disponía de la consistencia, ni física ni mental, para disputar dos mangas seguidas en plenitud. El estadounidense volvió a perder fuelle y enseguida Coric puso el cuarto set en su favor. Repitiendo la táctica del segundo parcial, siendo más agresivo y restando con más profundidad, el tenista local forzó el quinto y definitivo set con otro contundente 6-1

Gran diferencia en el porcentaje de puntos ganados con primer servicio de ambos en el quinto set: Coric, 14 de 16, un 88%, y Tiafoe un 56%, nueve de 16Llegaba el momento cumbre de la eliminatoria y daba la sensación de que el encuentro estaba en la raqueta y, sobre todo, en la cabeza de Coric. Si al croata no le temblaba en brazo, ya que físicamente se encontraba muy superior a su rival, esto sería suyo. Y así fue. Tiafoe quemó sus naves en el inicio, disponiendo de un 15-40 para comenzar 2-0 arriba. Coric recurrió al servicio para salvar el problema y cuando tuvo su oportunidad, esta vez no falló. Con un 'passing shot' ganador de revés, el croata lograba el 'break' (3-2) y hacía estallar al público local que, tras una dramática tarde, ya veía el final del túnel. 

Tiafoe ya no tenía respuesta para volver al partido. Su única baza es que a Coric le entraran las dudas otra vez, pero ahora el croata aguantó la presión a la perfección y ni siquiera tuvo que sacar para el partido, al lograr la rotura definitiva que le daba la victoria y el triunfo en la serie en el noveno juego (6-3). Coric lo celebró con rabia, aliviado y consciente de que, en muchos momentos del partido, la victoria había estado lejos. El viernes esto estaba visto para sentencia. Nadie daba un duro porque Estados Unidos pudiera siquiera forzar este quinto encuentro pero la Copa Davis, en este formato claro está, continúa teniendo esa magia especial que hace posible los milagros.

Los estadounidense lo rozaron, creyeron que era posible la hazaña y estuvieron a sólo un set de culminarla, pero tendrán que seguir esperando para volver a una final de Copa Davis. Será Croacia la que desafía el poder de los vigentes campeones, Francia, que recibirán a los balcánicos a finales del mes de noviembre en la que será la última final con el formato tradicional. Croacia buscará su segundo entorchado, tras el de 2005, mientras que para los galos sería el undécimo, desempatando con Gran Bretaña en el tercer lugar.