Toda una semana repleta de partidos y al final todo se decidió por un punto. Así fue el desenlace de la Copa Hopman 2019, que se saldó con un nuevo triunfo de la Suiza de Roger Federer y Belinda Bencic, que revalidaron su triunfo de 2018 ante el mismo rival que hace un año, la selección de Alemania formada por Alexander Zverev y Angelique Kerber. Tras las victorias por la vía rápida de Federer (6-4 y 6-2) y Kerber (6-4 y 7-6) sobre Zverev y Bencic, respectivamente, se asistió a un trepidante dobles mixto que terminó con triunfo para los suizos por 4-0 1-4 y 4-3(4) en un último 'mini-tiebreak' que se decantó del lado de los vigentes campeones por un sólo punto, 5-4. 

En su choque ante Zverev, Federer se mostró intratable con su servicio, con un 30 de 33 con primero, un 91% de efectividad

El primer choque de la jornada era el más esperado desde que comenzó la competición. Pero finalmente no fue tal, puesto que Federer no dio ninguna opción a un Zverev que sólo mostró resistencia durante el primer tramo del partido. El alemán aguantó, no sin problemas, hasta el 4-4 del primer set. Dos juegos más tarde cedería la manga, lo que le pasó factura anímicamente, dejándose ir ante un Federer desatado que, en una hora y 12 minutos de juego, sumó el primer punto de la final por 6-4 y 6-2. 

Tras la decepción de Zverev, las esperanzas teutonas quedaban en manos de Angelique Kerber. Sin mostrar una gran superioridad pero manteniendo el control en todo momento, la número dos del mundo se impuso en su duelo ante Belinda Bencic por 6-4 y 7-6(6). Kerber sólo tuvo problemas al final del segundo set, desperdiciando dos servicios para cerrar el encuentro con 5-4 y 6-5, respectivamente. Pese a ello, la de Bremen no dio más vida a una irregular Bencic llevándose el 'tie-break' por 8-6 aprovechando su tercera bola de partido. 

Así las cosas, todo se acabaría decidiendo en el decisivo encuentro de dobles mixto. Suiza comenzó de manera fulgurante y en 13 minutos se hizo con el primer parcial por 4-0. Zverev despertó de su letargo y con ello las opciones de Alemania, que forzó el set definitivo con un 4-1 claro en el segundo. Cuanto más cercano se encontraba el final de la eliminatoria, más posibilidades había de terminar por todo lo alto, en un 'mini-tiebreak' a cinco puntos y sin necesidad de ganar por dos puntos de diferencia. Era el guión soñado, tanto para la organización como para los espectadores que llenaban la pista central de Perth, y así fue. Un estratosférico resto de Zverev daba a los alemanes sus primeras dos bola de partido. El problema es que ambas serían al resto y con Federer al servicio al otro de la red. El mejor tenista de todos los tiempos no falló con la primera, pero cedió el protagonismo a Bencic en la segunda, que con una volea al centro que no pudo devolver Zverev ejecutó a Alemania poniendo el definitivo 5-4 en el marcador. 

Se trata de la cuarta Copa Hopman para los helvéticos, la tercera para Federer, que ya conquistó una hace nada más y nada menos que 17 años formando pareja con Martina Hingis, y la segunda consecutiva para el de Basilea y la propia Bencic. Además, el 'Maestro' suizo agrandó aún más su leyenda al convertirse en el primer jugador/a con tres títulos en el palmarés de esta competición. Tras esto, ahora toca poner rumbo a Melbourne, escenario del primer Grand Slam de la temporada, el Open de Australia, que dará comienzo el próximo lunes 14 de enero y que contará con los cuatro protagonistas de esta final, probablemente la última de esta competición.