Cerca, muy cerca, estuvo Simona Halep de abandonar el Open de Australia a las primeras de cambio por tercera vez en los últimos cuatro años. La actual número uno del mundo se quitó un peso de encima en su partido de primera ronda al remontar a la estonia Kaia Kanepi por 6-7(2) 6-4 y 6-2 y desquitarse así de la derrota que sufrió ante esta misma jugadora en el pasado US Open. 

Kanepi acabó muy descontrolada con sus errores no forzados, llegando a los 62 en el total del encuentro. Halep, en cambio, fue de menos a más para finalizar con 25 golpes ganadores y 19 errores

Con ese infausto recuerdo todavía presente en su cabeza, Halep nadó a contracorriente durante gran parte del choque. La potencia en los golpes de Kanepi era demasiado para la rumana, aún falta de ritmo en el que era sólo su segundo partido en casi tres meses. La estonia, actualmente en el puesto 70 del mundo pero con tenis para estar mucho más arriba, terminó llevándose la primera manga en un contundente desempate por 7-2. Antes de eso, Haleo ya había tenido que levantar dos puntos de set en el juego anterior. 

Kanepi perdona y Halep se lo hace pagar

La número uno del mundo había luchado fieramente para llevarse ese primer parcial pero, al ver que su esfuerzo había sido en vano, su ánimo comenzaba a desvanecerse. Kanepi pareció poner la directa con un 'break' en el tercer juego del segundo set (2-1). La estonia tenía el partido donde quería y sólo con conservar su servicio le hubiese valido para dar el primer campanazo del torneo. Sin embargo, el respeto que infunde la mejor tenista del mundo bloqueó a Kanepi, que regaló su ventaja con un par de errores de bulto, un 'smash' fuera y una doble falta. 

Aliviada, Halep comenzó a creer de nuevo en sí misma y en que era posible levantar el encuentro. Poco a poco, el cansancio, tanto físico como mental, iba haciendo mella en su oponente, cada vez más errática y con más problemas para mantener su servicio. Tanto es así, que al final el cántaro se rompió y en el momento más oportuno para Halep. Con 5-4 y restando para igualar el partido, la rumana hizo valer su insistencia y aprovechó su cuarta bola de set para terminar adjudicándose la segunda manga.

El resto ya fue coser y cantar para la tenista de Constanza, que puso tierra de por medio definitivamente en un tercer set bastante controlado por su parte. Por su fuera poco, Kanepi acabó mermada con una ampolla en su mano izquierda, facilitando aún más las cosas a Halep, que no tuvo mayores problemas para sentenciar por 6-2 tras dos horas y once minutos de juego. De esta manera, la primera favorita del cuadro y actual finalista da el primer paso hacia delante e un torneo que no se lo va a poner nada fácil, a tenor del cuadro tan duro que se le presenta. Y es que si está primera ronda ya ha sido la mar de complicada, otro tanto le espera a la rumana en la segunda, donde se medirá a la estadounidense Sofía Kenin, número 56 del mundo pero que viene lanzada tras conquistar la semana pasada en Hobart su primer título como profesional. Sin duda, otra prueba de fuego para la número uno del mundo en su intento de repetir la final del año pasado.