Hace 31 años, nacía en Bremen, Alemania, Angelique Kerber, una tenista zurda que, con el paso de los años, acabaría siendo número uno del mundo y ganaría tres Grand Slams, al menos hasta el 18 de enero de 2019. La germana, en el día de su cumpleaños, iba a volver a hacer acto de presencia sobre las instalaciones de Melborune Park.

Esta vez, para disputar su encuentro de tercera ronda y proseguir así con el objetivo de poder volver levantar el título que ya levantó hace dos años en la misma pista en dónde hoy regresaba a la acción ante la tenista australiana, invitada por la organización del torneo, Kimberly Birrell, que despachó en primera ronda a la española Paula Badosa y a la croata Donna Vekic, vigésimo-novena cabeza de serie, en su segundo envite.

Jugar el día de tu cumpleaños siempre puede crear cierta presión en un jugador. El hecho de querer regalarse a uno mismo una victoria es un bonito regalo, y eso es lo que buscaba Kerber en la jornada de hoy. Sin ningún tipo de presión salió la ex número uno del mundo para poner punto y final a la quinta jornada de competición en la Rod Laver Arena y también para finalizar la sesión nocturna, una sesión que abrieron Rafa Nadal y Álex de Miñaur previamente.

Un ciclón llamado Kerber | Foto: WTA
Un ciclón llamado Kerber | Foto: WTA
 

Tras los primeros compases iniciales de tanteo, la alemana rápidamente puso la directa en el choque. Realizando su más que distintivo juego de contraatques y solidez, como si del muro de Berlín se tratase, Kerber fue desquiciando con el paso de los minutos a una Birrell que cada vez perdía más la paciencia y comenzaba a cometer más errores con el propósito de querer buscar alguna alternativa para desarbolar a Kerber.

La germana, en su salsa, se alimentaba de los errores de Birrell a la par que daba un fabuloso festival de golpes angulados y ganadores que hacían imposible la devolución de la bola por parte de la australiana al campo rival. La australiana, viéndose con el partido prácticamente perdido, se soltó aún más de lo que lo estaba haciendo en los últimos compases del encuentro con el objetivo de disfrutar de sus últimos minutos en el Grand Slam de su país.

Kerber bajo la nocturnidad de Australia | Foto: Aus Open
Kerber bajo la nocturnidad de Australia | Foto: Aus Open
 

Pese a que conectó varios golpes ganadores, fruto de la frustración del momento, nada pudo evitar el desenlace que se estaba viendo desde hace ya varios minutos. Dos minutos antes de llegar a la hora de partido, Angelique Kerber doblegaba a Kimberly Birrell por 6-1 y 6-0 y daba por concluido su partido de tercera ronda y clasificarse así para los octavos de final del Open de Australia y cruzarse con la estadounidense Danielle Collins que también arrasó con la favorita Nº19 del torneo, la francesa Caroline Garcia.

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