El tenista griego Stefanos Tsitsipas continúa su imparable escalada hacia los puestos de honor del ránking ATP y hoy sumó su segundo título como profesional al imponerse en la final del ATP 250 de Marsella al kazajo Mikhail Kukushkin, 50 del mundo, por 7-5 y 7-6(5) en casi dos horas de juego. El primer cabeza de serie del cuadro y actual número 12 del mundo cumplió con los pronósticos aunque no le resultó nada fácil ante la gran resistencia de Kukushkin, que tuvo en su poder forzar la tercera manga al servir para ello. Finalmente y pese a sus 20 años, la madurez de Tsitsipas se acabó imponiendo en un ajustado desempate. 

El griego conectó 15 saques directos y se llevó el 84% de puntos con primer servicio, 41 de 49

Un encuentro que tuvo dos sets claramente diferenciados. El primero, con muy poco ritmo y mucho protagonismo de los servicios. En el momento clave, con 6-5 arriba y restando para ganar el set, Tsitsipas apretó lo justo y le sirvió para provocar el error de Kukushkin para apuntarse la primera manga. El segundo, con una gran reacción del kazajo, que logró su primer 'break' del partido en el quinto juego (3-2).

Tsitsipas sufrió en exceso con su segundo servicio (9 de 18) y estuvo muy cerca de verse obligado a jugar un tercer parcial. Con 4-2 abajo, el griego se sobrepuso a un 15-40 en contra que hubiese significado el adiós a este segundo set. En cambio, el número 12 del mundo no sólo superó ese delicado momento, sino que consiguió alargar el parcial gracias a un 'break' en el décimo juego (5-5). Al igual que en el primer set, Kukushkin cedió ante la presión en el peor momento y desperdició una oportunidad de oro de la que terminaría arrepintiéndose unos minutos más tarde. Y es que en el 'tie-break' final, Tsitsipas supo mover perfectamente a su adversario desde el fondo de pista para imponerse por 7-5 y conquistar su segundo título como profesional.  Kukushkin, en cambio, seguirá sin poder romper su sequía en el circuito que dura ya nueve años (San Petersburgo 2010 frente a Mikhail Youzhny). 

No cabe duda de que la progresión de Stefanos Tsitsipas es imparable y que es cuestión de tiempo que entre a forma parte del selecto top10. Por lo pronto, mañana aparecerá como número once del mundo y se afianza en el tercer lugar de la Carrera hacia Londres