El primer WTA Premier Mandatory de la temporada ha comenzado y fue de la mejor manera para Angelique Kerber, que doblegó a Yulia Putintseva por 6-0 y 6-2 en una hora y cuatro minutos de partido. La alemana estuvo endemoniada y le salió todo prácticamente bien, que dejó a la kazaja sin oportunidades para soñar con un milagro.

De arranque, la nacida en Bremen le marcó la cancha a su rival, ya que logró consumar el primer quiebre del encuentro en el juego inicial, aprovechando la primera oportunidad que dispuso. Pese a estar quiebre abajo, Putintseva no le puso fáciles las cosas a Kerber, que tuvo que trabajar para confirmar la rotura. En el tercer juego, la teutona volvió a romper el saque de su adversaria y se puso 3-0.

La kazaja dejó pasar un break point en el cuarto game y en el quinto volvió a ceder su servicio, para que la ex número uno del planeta se empezara a consolidar en el primer capítulo. Acto seguido y sin mayores preámbulos, la alemana dispuso de su primer set point y, tras un intenso peloteo, Putintseva terminó tirando un drive largo, para que Kerber se asegurara el primer set por un categórico 6-0.

Las acciones comenzaron de una forma similar en la segunda manga, dado que Kerber comenzó con el pie derecho, consumando la primera rotura del episodio y repitiendo la acción en el tercer game, para tomar una muy buena ventaja en el capítulo. La kazaja no podía encontrar una respuesta y era avasallada, perdiendo diez juegos de forma consecutiva.

Luego de ese vendaval, Putintseva pudo ganar su primer juego en el encuentro, pero estaba realmente lejos en el marcador y su eliminación era casi inminente. Kerber nunca levantó el pie del acelerador y siguió concentrada en su trabajo, evitando cualquier tipo de sorpresa. En el primer punto para partido, la alemana no perdonó y, con una derecha paralela, puso cifras definitivas al partido en el desierto californiano.