Uno de los motivos de la regularidad y vigencia de los mejores del mundo como Novak Djokovic, Rafa Nadal o Roger Federer, entre otros, es que cuando necesitan su mejor versión, ésta aparece sin mayores problemas. Tras las dos exhibiciones del balear ante Jeremy Chardy y Nikoloz Basilashvili, Djokovic no quiso ser menos y también activo su versión más demoledora para acceder con contundencia a los cuartos de final del Masters 1000 de Roma. El número uno del mundo salió muy reforzado de la doble jornada de hoy en la capital italiana con sendos triunfos por la vía rápida ante el canadiense Denis Shapovalov (6-1 y 6-3) y el alemán Philipp Kohlschreiber, éste último por 6-3 y 6-0 en apenas una hora y dos minutos de juego. 

Djokovic aprovechó sus cuatro oportunidades de break, mientras que Kohlschreiber no pudo hacer efectivas ninguna de las tres que dispuso

El serbio tenía clara una cosa: pasara lo que pasara, no se iba a desgastar lo más mínimo. Debido a su extraordinaria solidez desde el fondo de pista, no se suele ver la versión más agresiva del número uno mundial, pero hoy era distinto. Djokovic salió a por todas y con ganas de que esto no durase demasiado. Obviamente, también el rival tiene que colaborar un poco y Kohlschreiber no se pareció en nada al hombre que lo batió hace apenas dos meses en Indian Wells. Un 'break' de entrada fue suficiente para 'Nole' que, con la consigna de no dar nada de ritmo a su rival, también se relajó en ciertos momentos de la primera manga, pero para volver enseguida a elevar su nivel. En 37 minutos y aprovechando su tercera bola de set, la táctica de Djokovic daba resultado al llevarse este primer parcial por 6-3. 

Si en esta primera manga el serbio se había conformado con obtener una mínima ventaja y dejar el resto en manos de su servicio, en la segunda ya no tuvo piedad, endosando un rosco a un Kohlschreiber totalmente superado y que solamente tuvo una oportunidad de meterse en el partido. Fue en el cuarto juego y ya con Djokovic 3-0 y doble 'break' por delante. El balcánico volvió a pecar de cierta relajación y concedió tres opciones al alemán de romperle el servicio. Pero tan rápido como aparecieron, esas tres bolas de 'break' se difuminaron debido a la enorme suficiencia del serbio, que solventó el problema para poner el piloto automático directo hacia los cuartos de final.

Así las cosas, esta doble jornada que se preveía tensa y difícil para los primeros cabezas de serie ha demostrado que éstos están sobradamente preparados para este tipo de circunstancias y con varias marchas más en su juego que, llegado el caso, elevan con total tranquilidad. En la antepenúltima ronda del cuadro, el cuatro veces campeón en el Foro Itálico se verá las caras con un viejo conocido que regresa a la alta competición tras varios meses en el dique seco, el argentino Juan Martín del Potro. El tandilense, actual noveno mejor jugador del ránking ATP, también sacó adelante con solvencia sus dos compromisos en Roma ante el belga David Goffin y el noruego Casper Rudd, respectivamente. Ambos, serbio y argentino, reeditarán los dos choques de 2009 y 2017 en esta misma ronda que terminaron, ambos, en poder del serbio.