El español Roberto Carballés tuvo muy cerca dar la sorpresa en el ATP 250 de Antalya (Turquía). El de Tenerife, que ocupa el puesto número 72 del mundo, cayó por un ajustado 3-6, 6-1 y 7-5, frente al segundo favorito del cuadro, el francés Adrian Mannarino, en la segunda ronda y tras dos horas exactas de partido. Su verdugo, reciente campeón del torneo de s'Hertogenbosch, y actual finalista de las dos anteriores ediciones de este torneo, tuvo que sudar tinta para vencer la resistencia del español, que vendió muy cara su piel llegando a estar a un sólo juego del triunfo.

Carballés logró salvar once de las quince oportunidades de rotura a las que hizo frente. En cambio, sí aprovechó las dos que dispuso

Mannarino, que no compitió la semana pasada en Queen's debido al desgaste producido la semana anterior en Holanda, tardó en encontrar su ritmo, lo que le costó un primer set en el que Carballés aprovechó la única opción que tuvo para romper el saque del francés (3-0). Éste quiso reaccionar de inmediato, pero Carballés, en una circunstancia que se repetiría durante el resto del partido, estuvo prácticamente perfecto en los momentos de tensión con su servicio, salvando cinco bolas de 'break' que el francés dispuso en el quinto juego. En 39 minutos, el tinerfeño aseguró la primera manga a su favor por 6-3

Mannarino acabó imponiendo su pegada

El problema para el español es que, como ya se ha mencionado anteriormente, no tuvo casi ningún turno de servicio tranquilo en todo el choque. Mannarino elevó su nivel de presión al resto, lo que surtió efecto en un segundo set que se llevó de manera contundente por 6-1 tras dos 'breaks' consecutivos. El guión resultó similar en el tercer y definitivo set. Carballés volvió a reencontrarse con su primer servicio (había metido sólo un 29% en el segundo set), para llegar a salvar otras seis bolas de rotura. Pero tanta insistencia de Mannarino tuvo premio en el séptimo y undécimo juegos, donde acabó logrando dos quiebres que desnivelaron el encuentro de forma definitiva. 

El español luchó hasta el final, devolviendo el primer 'break' y llegando a situarse 5-4 arriba en la última manga, pero un parcial de 3-0 a favor del francés en el tramo final, le acabó costando la victoria. Fue en su tercera bola de partido cuando Mannarino conectó el saque directo abierto tan característico de zurdo que llevaba buscando, poniendo el 7-5 definitivo tras dos horas de duración. El galo, que por su condición de segundo cabeza de serie había gozado de un 'bye' en primera ronda, se medirá al italiano Lorenzo Sonego, número 75 del ránking ATP, por un puesto en los cuartos de final.