El tenista mallorquín accede a cuartos de final al arrollar a Lajovic en un plácido encuentro en dos sets con una soltura absoluta en el encuentro disputado en la Centrale del Masters 1000 de Roma.

Fue un partido en el que el inicio fue un tanto alborotado, con tres roturas de servicio en los cuatro primeros juegos. La exigencia que impuso el balear desde el fondo de la pista fue notable en todo momento, hasta el punto de romperle el servicio a su rival en las tres opciones que dispuso, inclusive un largo juego de doce minutos de duración que logró cerrar con una derecha ganadora a un metro de la valla publicitaria del lateral de la pista.

Si bien es cierto que Rafa llegaba a este Masters sin preparación alguna, este choque le permitió entonar el ritmo de sus piernas de cara a las rondas venideras con rivales de más entidad. El tenista serbio buscó sus pocas opciones con cambios de ritmo y revés a una mano, pero nada impediría a Rafa llevarse el primer set en 43 minutos.

El segundo set permitiría al de Manacor gestionar el esfuerzo. Se puso rápidamente por delante al romper el servicio de su rival en dos ocasiones, aunque Lajovic recuperaría una de las roturas, amagando con una reacción al pasar del 0-4 al 3-4. Sin embargo, el número 2 del mundo terminaría cerrando al resto una victoria y un pase a cuartos de final, ronda que alcanzaría en las últimas 15 de sus 16 visistas a esta pista.

Así pues, Rafa se enfrentará el sábado por la noche, a partir de las 20:30h en un duelo de tenistas de habla hispana al argentino Diego Schwartzman, que vencería a Hubert Hurkacz por 3-6 6-2 y 6-4 en un duelo más largo y complicado que el del balear tras casi 2 horas y 10 minutos de lucha en este caso en la Grand Stand Arena.

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