Jornada de domingo sobre el International Abu Dhabi Tennis Center con la disputa de los encuentros de tercera ronda del WTA 500 que abre la temporada 2021. En la Court 1, Veronika Kudermetova derrotó a Paula Badosa en tres sets en un duelo marcado por la irregularidad y los errores.
Kudermetova se mantiene de pie tras los primeros instantes del partido.
Como suele ser recurrente en el circuito femenino, los breaks son un ingrediente que está a la orden del día en todo plato de tenis WTA, que los seguidores estén dispuestos a degustar. Kudermetova y Badosa comenzaron muy titubeantes al inicio, lo cual provocó una pequeña sangría de breaks en los compases iniciales del partido.
Con la española al saque en el primer turno de servicio, se produjeron tres roturas de saque consecutivas, algo que significó que la tenista rusa se colocase por delante en el servicio. Tras este inicio un tanto inquietante, las pelotas de break se camuflaron durante el resto del primer set como si de un camaleón se tratase. Ambas jugadoras mostraron una gran fortaleza en el servicio y no cedieron el timón al saque. Kudermetova se benefició de la ventaja lograda de un break a favor y condujo el primer set hasta acabar apuntándoselo por 6-4.
Paula le pone sal y pimienta
Si bien la tónica de casi todo el primer set fue la solvencia y contundencia en el servicio, en los siguientes minutos, que dieron el pistoletazo de salida al segundo set, volvieron a producirse esos instantes de inquietud y desconcierto en el servicio de Kudermetova y de Badosa. La española comenzó mandando y desde momento, se produjeron cuatro breaks consecutivos.
Tras esa montaña rusa de continuas emociones donde Paula pudo poner tierra de por medio, pero no fue capaz de hacerlo, de nuevo regresó la seguridad en el servicio. El partido no disfrutaba de puntos espectaculares, salvo en momentos puntuales. O se llegaba el winner o se producía el error o por supuesto también se vislumbraba el error forzado producto del buen hacer de una u otra tenista.
Con ello, el segundo set se adentró en sus compases finales y más tensos. Cualquier error de una u otra jugadora podía significar ver la gloria para una o hacer las maletas camino a casa y preparar el Open de Australia para otra. O bueno, quizás poner un poco más de sal y pimienta al partido y alargar un poco más este duelo de octavos de final (que finalmente fue lo que ocurrió). En un alarde de inspiración por parte de la española y de precipitación de la rusa, Paula Badosa encontró la llave para devolver a Kudermetova el marcador del primer set y forzar así un tercer set que se presentaba fulgurante e interesante.
Kudermetova resuelve al final
Kudermetova comenzó fuerte el parcial definitivo. Haciendo gala de una gran estirada, la rusa coló un resto ganador en la esquina para comenzar rompiendo el saque de la española. Si bien la española se adueñó del segundo set, la sensación que dejó ese parcial fue más bien la de que Badosa se encontró con el set tras haber desperdiciado las ventajas de break.
Kudermetova parecía más entera en el partido y con la convicción necesaria para llevarse el partido. Perder el segundo set no la afectó para nada. Es más, podría llegar a decirse que quien pareció perder el segundo parcial fue la española y no la rusa. Paula no supo gestionar el haberse llevado el segundo set y el partido se le hizo muy cuesta arriba en el tercer parcial. La rusa no dudó en hacer daño y ahondar en la herida de la española y doblegó a Badosa por 6-4 4-6 y 6-1 en casi dos horas de partido. Kudermetova, a cuartos de final. Paula, de vuelta a casa a preparar los torneos en Melbourne y el Open de Australia, gira que dará comienzo el 31 de enero. La progresión de la española, más que latente.