El único favorito que hasta el momento no había cedido un set. Con esta carta de presentación llegaba 'Nole' a los octavos de final del segundo Grand Slam de la temporada. Enfrente, el alemán Philipp Kohlschreiber, uno de esos jugadores que cuando se agarran a la pista te hacen sudar y pasarlo mal. Entró con fuerza a la Philippe Chatrier después de un torneo bastante plácido para él. El partido acabó con un 4-6, 6-3, 6-4 y 6-4 y después de casi tres horas de duración. Novak Djokovic se llevó su primer susto en Paris pero pasa a los cuartos de final, donde ahora tendrá como rival a otra de las sorpresas del campeonato, el también alemán Tommy Haas.

El partido comenzó con los dos tenistas bien enganchados en la línea de fondo. Los peloteos eran cada vez más largos y no tenían dueño absoluto. El germano empezó a enseñar sus armas pronto haciendo hasta cinco golpes ganadores en los primeros compases del encuentro. Así se llegaría al quinto juego del parcial. 'Nole' se encapotó. Empezó a cometer algún error de bulto que le costó muy caro. Perdió la paciencia y se jugó un golpe cuando Kohlschreiber le forzó para ganar el punto al resto. Después, le bastó mantener su saque con solvencia para empezar a mandar el partido en lo que sería la sorpresa de la mañana.

Contundente reacción

El aire también quiso ser protagonista en la pista central de Roland Garros. Le dio un respiro a Djokovic en el momento en el que el tenista alemán empezó a cometer unos errores que hasta el momento no habían aparecido. Por eso el segundo parcial fue un calco del primero pero con contrario resultado. Fue 'Nole' el que hizo daño con sus golpes. Quebró en el cuarto juego y para conseguir la confirmación tuvo que conseguir hasta seis golpes directos. Kohlschreiber no bajó los brazos y siguió peleando pero el número uno solo necesitó sus servicios para empatar el partido y ver el horizonte más despejado.

Djokovic ganó llevando la iniciativa

Partido atípico en tierra batida. Pocas roturas y las que había resultaban clave para el devenir de los diferentes parciales. Tras la reanudación, los dos jugadores mantuvieron sus primeros saques. El 1-1 mandaba en el marcador, momento en el que de nuevo el serbio apretó para volver a tomar ventaja. A pesar del buen juego del tenista alemán, el número uno demostró por qué es el mejor del mundo en estos momentos. Sobriedad, claridad y contundencia son las palabras clave de su juego en los momentos difíciles.

En el cuarto y definitivo set, fue de nuevo Djokovic quien llevó la iniciativa. Se llegó al 2-2 de la misma manera que en las primeras mangas. La batalla era dura desde el fondo y la red un territorio que ninguno de los dos quería pisar. Fue el instante en que todo cambió. El vendaval 'Nole' azotó la Philippe Chatrier y confundió a Kohlschreiber. Hizo tres juegos seguidos y se puso con saque para ganar. Sin embargo, le entraron las dudas e incluso el germano tuvo un 5-4. El segundo servicio para pasar de ronda no lo marró y sirvió para estar en los cuartos de final. Ahora, Novak Djokovic quiere amenazar el trono de Rafael Nadal y conseguir el único Grand Slam que le falta.

Fotografía: AP.