Después de la ajustada derrota en los cuartos de final de Chennai ante Borna Coric, Roberto Bautista llegaba a Auckland con el objetivo de ultimar su preparación de cara a la primera gran cita del año, el Australian Open.
El español era el encargado de abrir la jornada en la pista central, donde le esperaba el vigente campeón del torneo: el joven checo Jiri Vesely. Con 22 años, Vesely es uno de los jugadores con mayor proyección del circuito. Correoso como el que más, el checo siempre sabe ponerle las cosas difíciles a los grandes, y fue precisamente en las pistas de Auckland donde su nombre comenzó a sonar con fuerza.
El espectáculo estaba servido. Tanto Bautista como Vesely venían de una gran campaña, y el 2016 debe ser el año en el que "asalten el cielo".
El primer set se definió por pequeños detalles
El partido, como suele ocurrir en las primeras rondas, arrancó de una forma algo fría. Era la primera vez que ambos tenistas se enfrentaban, y el tanteo y estudio del rival fue la tónica dominante durante los primeros juegos. Sin apenas apuros al saque, llegábamos al 3-3.
El partido iba entrando en calor, y los dos jugadores subieron la intensidad y el ritmo. En el séptimo juego, Jiri Vesely disfrutó de una primera bola de break que no pudo aprovechar. En el juego siguiente, Roberto daba la réplica y, esta vez sí, no dejaba escapar la oportunidad. Con 5-3 arriba, al español no se le encogió el brazo para cerrar un set en el que había sido ligeramente superior.
Bautista se llevó la batalla del segundo set
El desenlace del primer parcial dejó aturdido a Vesely, que cedió su servicio a las primeras de cambio. El de Castellón seguía a lo suyo, e incluso dispuso de una nueva bola de break para poner el 3-0 en el marcador, lo que hubiera dejado prácticamente sentenciado el encuentro.
Vesely consiguió sacar adelante su saque, despertando de su
Las oportunidades de break proliferaron en el segundo setaturdimiento. El checo subió el nivel, los tiros eran más incisivos y profundos. Bautista se vió sorprendido y las bolas de break fueron apareciendo. El español salvó las tres primeras, pero a la cuarta, Vesely recuperaba el servicio perdido y devolvía la igualdad al marcador.
La proliferación de las oportunidades de rotura en ambos lados respondía al bajo porcentaje de primeros servicios, especialmente en el caso de Roberto (59%).
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La seguridad volvió al saque de ambos jugadores, pero con 5-5 en el marcador, Vesely vio demasiado cerca el abismo y el vértigo hizo que cediese, de forma inexplicable, su servicio en blanco. Roberto Bautista no rechazó el "regalo" y, tras 1 hora y 17 minutos, sellaba su pase a octavos por 6-3, 7-5.
En octavos de final, Roberto Bautista protagonizará otro duelo inédito en el circuito. Su rival será Donald Young, que se deshizo de la Wild Card local, Finn Tearney (6-2/6-3).