El pasado domingo María Sharapova hizo saltar todas las alarmas, al anunciar una importante comparecencia ante los medios de comunicación para este lunes (21:00 hora española). La lesión en su antebrazo izquierdo, que le había impedido inscribirse en Indian Wells, y que arrastra desde el pasado curso, hacía presagiar una prematura retirada de la rusa que el próximo mes de abril cumplirá 29 primaveras. Sin embargo, la noticia ha sido otra, aunque de un alcance aún mayor: la siberiana no superó un test antidopaje en el Abierto de Australia.

Melbourne ha sido el único torneo que ha disputado Sharapova este año, y en el que llegó a cuartos de final, donde fue apeada por Serena Williams. La rusa, dolida, ha explicado el positivo se debe a una sustancia que toma desde hace diez años: "Es una medicina recetada por el médico de mi familia, que me ha ayudado a combatir distintos problemas de salud". En concreto, la diabetes que padecen varios miembros de su familia. 

La famosa sustancia, según la Agencia Mundial Antidopaje, es el meldonium, contendi en un medicamento llamado Mildronate, que incrementa la resistencia de los deportistas, ayuda a la recuperación tras el ejercicio y reduce el estrés. Hasta este mismo año, estaba permitida. "Esta medicina nunca estuvo prohibida por la ITF. Pero desde el 1° de enero las reglas cambiaron y ahora sí lo está. Hace pocos días la ITF me informó de la situación y asumo toda responsabilidad en el hecho", ha explicado la rusa. 

La campeona de cinco grand slam, que conocía la noticia desde hace unos días tras recibir una carta de la WTA, ha admitido que se ha equivocado: "Cometí un error". Sin embargo, espera una "segunda oportunidad" y ha anunciado que colaborará con las autoridades de la Federación Internacional de Tenis. En su comparecencia en los Ángeles también ha manifestado que desconoce el tiempo que será inhabilitada del tenis, aunque ha rehuido cualquier posibilidad de retirada. 

Comunicado WTA

Poco después del mensaje de Sharapova, Steve Simon, jefe ejecutivo de la WTA, ha emitido el siguiente comunicado oficial:

“Me entristece escuchar estas noticias de Maria. Maria es una líder y siempre la he conocido como una mujer íntegra. Sin embargo, como Maria conoce, es responsabilidad de cada jugadora conocer lo que introduce en su cuerpo y conocer si está permitido. Este asunto está ahora en manos del Programa Antidopaje de Tenis y sus procedimientos estándar. La WTA apoyará las decisiones tomadas durante el proceso”.