Pocos hubieran apostado al inicio del torneo porque uno de estos dos jugadores fuera finalistas del US Open. Wawrinka llegaba al torneo entre algodones a nivel físico. Se perdió los Juegos Olímpicos y había muchas dudas acerca de su rendimiento, además es un jugador tremendamente irregular capaz de lo mejor y lo peor, la temporada ha sido de momento inferior a las dos últimas, aunque cuenta con 3 triunfos en Chennai, Dubai y Ginebra. El caso de Nishikori es diferente. El nipón destaca por tener pocas derrotas ante jugadores fuera del Top 10 y casi todas sus derrotas son a manos de los líderes de la clasificación. No obstante, estos últimos años se ha comprobado que sufre un montón a la hora de ganar partidos importantes y a los mejores de la clasificación. Esto convierte en una sorpresa mayúscula la derrota de Murray ante el japonés. Ambos han tenido un torneo complicado y quizá Wawrinka sufrió más hasta la ronda de octavos, aunque sí que es cierto que el japonés tuvo más dificultad ante Murray tanto a nivel físico como psíquico, por lo que podría pasarle factura este enorme desgaste.

Stanislas Wawrinka: en busca de un nuevo "Grande"

"Stan" es un jugador que cuando encuentra un torneo donde se siente cómodo se convierte en un jugador temible. Poseedor de un poderosísimo servicio con el que factura muchos puntos y de uno de los mejores reveses del mundo, con el que consigue desestabilizar a la mayoría de sus rivales. La derecha tampoco se queda atrás y es capaz de lograr mucha potencia en sus golpes, así como, desestabilizar a su rival. Cuando estos elementos se han dado se le ha visto triunfar en el Open de Australia o en Roland Garros en las últimas dos temporadas. Cada temporada ha ido consiguiendo un Grand Slam menos esta. Pero con la calidad que atesora no es de extrañar que pudiera llevarse el torneo, en un cuadro donde Djokovic continúa con molestias y no está al cien por cien.

Wawrinka domina el H2H por 3-2El suizo domina el cara a cara, aunque la última victoria fue para el japonés hace relativamente poco, en las semifinales del masters 1000 de Cincinnati. Pero aunque domine le cara a cara las dos primeras victorias del suizo fueron hace demasiado tiempo como para tenerlas en cuenta. Aunque a buen seguro se puede asegurar que se verá un gran espectáculo y lo que eso implica, un gran tenis.

Kei Nishikori: en busca de cambiar la tendencia

Kei es un jugador tremendamente fiable ante jugadores de ranking inferior, pero siempre ha tenido problemas para dar "un golpe encima de la mesa" venciendo a jugadores de nivel superior o ranking superior. Es un caso parecido al de Tomas Berdych, jugadores muy fiables con rivales inferiores pero incapaces de ganar a jugadores de mejor ranking. Pero él viene de ganar a Andy Murray y esto seguramente le haya dado un plus de seguridad y de confianza e intentará aprovechar su buen momento para meterse en la final.

Nishikori ya fue finalista en el 2014En aquel año, el año de su definitiva explosión entre los 10 mejores, logró meterse en la final derrotando a Novak Djokovic en semifinales, aunque perdería la gran final ante un inconmensurable Marin Cilic.

Claves de la final

Será primordial para ambos jugadores lograr un alto porcentaje de puntos al primer servicio, y pueden ser muy peligrosos los intercambios de revés, porque este golpe es el mejor de ambos, por lo que el que logre ser más efectivo abriendo ángulos conseguirá una clara ventaja para luego continuar atacando con la derecha. También el apartado físico cobra un papel primordial, porque se espera una batalla dura y muy larga y si uno de los dos "pincha" la balanza se decantará defintivamente. Y como cualquier partido igualado, el que aproveche mejor las bolas de rotura tendrá mucho ganado.