Todos tenemos sueños, unos más difíciles de lograr que otros, e incluso parecen imposibles de que algún día puedan llegar a suceder, pero los sueños sueños son y alguna vez te puede llegar ese momento en el que algo que parecía prácticamente imposible de conseguir, al final se hace realidad. Por que a veces los sueños se cumplen, pero para conseguir hacer realidad ese sueño, no basta sólo con quererlo, también hay que trabajarlo día sí y día también y llegará un día en el que recogerás los frutos que sembraste anteriormente, o si no que se lo digan a Angelique Kerber.

Popularmente conocida en el mundo tenístico como "el muro de Bremen" o "la zurda de Bremen", Angelique Kerber ha logrado alzarse como campeona del US Open, consiguiendo levantar al cielo su segundo título "major", y además de escalar hasta el número uno del mundo y ser así la nueva reina del tenis femenino.

La que durante las próximas semanas reinará en el circuito femenino, pasó por los micrófonos: "Esto es simplemente increíble. No doy crédito aún. He ganado mi segundo Grand Slam. Sin duda alguna, es la mejor temporada de toda mi carrera", comentaba exultante Kerber con rostro tremendamente feliz.

La ya sucesora de Steffi Graf se refirió al épico partido y comentó que la única salida para darle la vuelta al tercer set, era creer en ella misma: "Comencé el partido realmente bien, muy fuerte. Mi estrategia era moverla (a Pliskova) y eso estaba intentando", afirmando que el plan de juego dio sus frutos. "En el segundo parcial sólo hubo una rotura", prosiguió Kerber comentado lo que sucedió en el definitivo parcial. "Y en el tercer set, naturalmente sólo me quedaba creer en mí, no me quedaban más alternativas que tener fé". Así lo hice y decidí ir a por ello. Pienso que esto fue la clave del tercer set". 

Tras proclamarse campeona del US Open, en la tradicional entrega de trofeos, la alemana congratuló el gran tenis realizado por Pliskova en estas dos semanas: "Te felicito, Karolina, por estas dos semanas increíbles que has vivido. Hemos jugado una gran final. Tienes un enorme futuro por delante", y también echó la vista atrás, recordando así el momento en donde comenzó todo para ella, precisamente en este mismo escenario: "Era la número 92 del mundo cuando se inició todo para mí aquí en el 2011 cuando conseguí alcanzar las semifinales", continuó emocionada la de Bremen. "Hoy, cinco años después, estoy aquí de nuevo y levantando el trofeo de campeona. No me lo puedo creer, todos mis sueños se han hecho realidad este año", terminaba Kerber agradeciendo el apoyo recibido de parte de toda la pista Arthur Ashe y deseando regresar en 2017 para defender su corona de campeona.

Kerber se ha convertido en la cuarta jugadora en la Era Open en conseguir jugar tres finales de Grand Slam en el mismo curso en el que logró la primera (Open de Australia, con título incluído), además de ser finalista en Wimbledon. El único 'pero' que se le puede poner a Kerber es la derrota en primera ronda con la holandesa Kiki Bertens, que a la postre sería semifinalista, pero aún asi ello no empaña esta temporada que pasará a la historia del tenis.