Hubo vida más allá del espectáculo ofrecido por los mejores del mundo en Flushing Meadows. El calendario tenístico no frena, y mucho menos en una segunda semana de Grand Slam. Con solo 16 jugadores en liza en el torneo individual, es necesario alimentar a los numerosos y hambrientos de gloria jugadores que desean seguir cogiendo ritmo y adquiriendo puntos para el ránking. Fueron seis los torneos disputados, de los que pueden obtenerse numerosas conclusiones, esperanzas, alegrías y decepciones.

Janowicz resurge de sus cenizas

El jugador polaco lleva años vagando por las pistas, incapaz de encontrar el equilibrio en su juego que le haga sacar su mejor rendimiento, aquel con el que sorprendió en el Masters 1000 de París 2012. Continuó en la élite durante 2013 y 2014, pero en las dos últimas temporadas se ha diluido cual azucarillo en café.

Después de caer en primera ronda del US Open ante Djokovic, el polaco se desplazó al Challenger de Génova en el que fue capaz de derrotar a jugadores del nivel de Zeballos, Berlocq y Almagro, consumados especialistas sobre tierra batida y cabezas de serie en el evento italiano.

Schwartzman cumple los pronósticos

La temporada del menudito jugador argentino está siendo realmente espléndida. Su título en Estambul está teniendo continuidad con buenas actuaciones tanto en otros eventos ATP como en torneos Challenger. Diego partía como primer cabeza de serie en Barranquilla, e hizo valer su favoritimo al proclamarse campeón.

Para ello, eliminó a Londero, Hernández-Fernández, Giraldo y Dutra-Silva, éste último en la final. Ya es 63 del mundo a sus 24 años, y parece estar en disposición de seguir mejorando sus prestaciones.

Alegrías inesperadas de Struff, Medvedev y Laaksonen

No siempre ganan los favoritos, y eso demostraron tres jugadores que oscilan en torno al top-100 y se afanan por entrar y consolidarse en él. No son habituales las alegrías para el alemán, el ruso y el suizo, pero pueden levantarse este lunes con la satisfacción del deber cumplido.

Struff ganó en Alphen al dar la campanada en la final ante Robin Haase, primer cabeza de serie del torneo. El teutón también había acabado con Dmir Dhumzur, segundo favorito al título, lo que culmina una semana sobresaliente para Jean-Lennard. El campeón en St Remy fue el ruso Daniil Medvedev, que aprovechó la sorprendente derrota en primera ronda de Stakhovsky para avanzar rondas. Bachinger, Janvier, Muller, Basis y De Loore fueron las víctimas del gran tenis desplegado por el soviético.

Además, en el primer destello de la gira asiática que comenzará en breves, Henri Laaksonen sumó un título que parecía predestinado para Jordan Thompson. Sin embargo, el joven australiano cayó en semifinales ante Jung y el suizo ganó en la final al coreano.