Había ecos de una posible retirada prematura, voces que alertaban de que había perdido la pasión por tenis y un poso de desasosiego al sentir que el circuito WTA había perdido un gran talento. Pero Caroline Wozniacki se negó a caer en el olvido y ha resurgido de sus cenizas. Con un US Open estelar que le devolvió la confianza, la de Odense se ha metido de lleno en la pelea por cualquier título.

Ganadora en Tokio, Wozniacki está cuajando una gira asiática realmente estelar, compitiendo de tú a tú con las mejores del mundo. Se presenta en Hong Kong con la intención de seguir mostrando su mejor versión, y adjudicarse el que sería el vigésimo quinto título en su carrera profesional. El inicio del cmino no podía ser más esperanzador, ante una gran jugadora como Saisai Zheng.

Wozniacki estuvo estelar en los momentos cumbre

El encuentro fue mucho más igualado de lo que muestra el marcador. Y es que la china tuvo oportunidades más que de sobra para conseguir muchos más juegos de los obtenidos. Sin embargo, la confianza de Wozniacki salió a relucir, mostrando su mejor tenis cuando más lo necesitaba. Caroline fue un muro inexpugnable cuando hubo bolas de break, tanto a favor como en contra, lo que dio lugar a un marcador que no es acorde con la dificultad del encuentro.

En la primera manga, Zheng salió muy agresiva y logró meter mucha presión sobre el servicio de la danesa. Hizo un break pero eso no sería más que un acicate para que Wozniacki hiciera su mejor tenis. La danesa aprovechó las tres oportunidades de rotura de las que dispuso y puso tierra de por medio en el marcador.

Zheng desperdició ocho bolas de break en el segundo set

El segundo parcial fue mucho más igualado, con una Zheng decidida a vender muy cara su piel. Jugó agresiva, metida en pista, y aprovechó una cierta relajación de Caroline. Llegó a disponer de la friolera de nueve bolas de rotura, pero solo pudo aprovechar una, lo cual reforzó moralmente a Wozniacki. La danesa cerró el partido con mucho oficio y se cita en la segunda ronda con la ganadora del duelo que disputan Heather Watson y Marina Erakovic.