Entrados en la treintena pero igual de traviesos, enérgicos e ilusionados. Así son Jo-Wilfred Tsonga y Gael Monfils, tenistas que parecen imprescindibles en el circuito por el carisma que desprenden. Referencias a nivel deportivo y social en Francia y símbolos del mestizaje y la adaptación de los inmigrantes en el país galo, ambos exprimen su carrera permaneciendo en la élite. Pero no se conforman. Tanto Tsonga como Monfils buscan un resultado rompedor en este tramo final de año. Shangai puede ser el escenario ideal para ello.

Tsonga superó a Tipsarevic

El jugador de Le Mans mostró su versión más sólida en el enfrentamiento ante el serbio. Tipsarevic está en pleno proceso de recuperación tras su sequía por lesiones y demostró tener armas para volver a puestos nobles del ránking. En el primer set Tsonga fue muy superior, pero todo se igualó mucho en la segunda manga. Janko gozó de una ventaja de break arriba, pero vio cómo Jo-Wilfred volteaba el marcador y se llevaba el encuentro en el tiebreak.

El resultado final fue de 6-3 7-6 (6) en favor de un Tsonga repleto de carácter competitivo, como el que necesitará para seguir avanzando en el torneo ya que su rival en tercera ronda será Marin Cilic o Alexander Zverev.

Monfils frena a Kevin Anderson

La "pantera de París" volvió a mostrar sus garras. Tras una gran semana en Tokio donde solo pudo ser frenado por Nick Kyrgios en la final, el galo quiere dar continuidad a su buen momento de forma y obtener los puntos necesarios para meterse en las ATP Finals. No lo tuvo fácil ante el sudafricano Kevin Anderson, contra el que tuvo que ponerse el mono de trabajo.

Monfils se llevó la primera manga por nimios detalles, y eso fue un golpe moral para Anderson. El partido finalizó con un marcador de 7-6 (4) 6-3 y Monfils espera al ganador del duelo entre Benoit Paire y David Goffin.