El grupo Edberg/Jarryd quedó perfilado después de la victoria de los hermanos Bryan en el primer partido de la jornada. Así pues, con la victoria de los gemelos estadounidenses a Dodig y Melo solo les valía ganar el partido y sumar dos puntos para colarse en el segundo puesto del grupo. Por su parte, a Murray y a Soares les bastaba hacer un set para colarse en las semifinales del Torneo de Maestros, pero estaba claro que a ellos no les iba a bastar con eso, iban a salir a morder y mantener su condición de invictos. Con lo cual las necesidades eran distintas, pero el objetivo de ambas parejas iba a ser la victoria.

El O2 Arena tenía cierta preferencia por la pareja formad de Murray y Soares ya ue sentían esa afinidad de paisano británico con Jamie. Él no quería defraudar a su público y Soares quería ganar la guerra civil con Melo, compañeros fuera de la pista (en ocasiones también dentro de ella) pero enemigos con la red por medio. El partido comenzó con la intensidad que se preveía. La pista, más rápida que en otras ediciones, favorecía a Dodig y Melo que ambos tienen poderosos servicios, a Jamie no le venía mal pero sí a Soares que es el que saca menos fuerte de los cuatro. A pesar de esto el único punto de rotura de la pareja croata-brasileña fue un punto decisivo con el servicio del escocés. El primer set estuvo muy igualado y se decidía por el acierto al pie de la red. Aquí Murray fue letal con la volea para quebrar el turno de servicio rival y ponerse por delante. El break fue tempranero, pero lo mantuvieron durante todo el parcial y se les antojó definitivo.

Murray y Soares ya habían sellado su pase a las semifinales anotándose el primer parcial, pero demostraron que ellos no iban a conformarse con eso. La pareja favorita rindieron durante todo el segundo set mejor que sus rivales, pero Dodig y Melo hacían, con menos, más y les iba valiendo para seguir dentro del partido. Un error de concentración de Murray y Soares, más del primero que del segundo, y el acierto de sus contrincantes igualaron el partido y llevaron la oportunidad de clasificación al tercer y definitivo set, donde se decidiría todo en el súper tie break.  

La ilusión de la clasificación, que estaba en su cumbre cuando comenzó el set definitivo, fue decayendo a medida que iba avanzando la manga y los rivales no fallaban. Dodig y Melo se fueron haciendo cada vez más pequeños y Murray y Soares iban sacando cada vez más pecho hasta extinguir la llama de la ilusión con una precisa volea.

Murray y Soares no pecaron de conformisimo y fue la perdición de la pareja rival que pelearon hasta el final para quedar fuera del torneo. A pesar de no terminar entre los dos primeros, el torneo de Dodig y Melo ha sido muy destacable y solo los fallos inoportunos les impidieron avanzar en el torneo. Murray y Soares siguen como favoritos al título después de su notable actuación en la fase de grupos y ya están en semifinales donde pelearan presumiblemente con Kontinen y Peers para lograr una plaza en la finalísima.